Dos muertos por meningitis en un centro de adultos discapacitados en Barcelona

Dos adultos de 39 y 61 años murieron por complicaciones derivadas de una meningitis en un centro para personas discapacitadas de Barcelona la semana pasada. Las dos víctimas contrajeron la infección y desarrollaron un choque séptico que no pudieron superar. La Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB) ha iniciado una investigación para esclarecer el origen del brote, el primero en 30 años en la ciudad.

Según ha informado la agencia en un comunicado, las muertes se produjeron los días 3 y 10 de abril. En el primer caso, el hombre, residente fuera de Barcelona, se empezó a quejar de síntomas como dificultad al tragar y fiebre. Tras ello, la dolencia se complicó y el paciente falleció.

Segundo caso

Días después, una mujer que compartía centro ocupacional con el primer afectado se quejó de fiebre, vómitos y cansacio. El cuadro clínico evolucionó en la misma dirección que la del del primer enfermo, y la enferma también murió.

El jefe del servicio de Epidemiología de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), Joan Caylà, ha manifestado que las dos víctimas mortales tenían enfermedades pulmonares y cardíacas previas.

Investigación en marcha

Tras los dos casos, que se cree que eran del tipo C, la ASPB puso en marcha el dispositivo quimioprofiláctico para proteger al resto de personas usuarias del centro ocupacional y a los residentes que compartían piso con la mujer, que también tienen necesidades especiales.

Según ha subrayado el organismo público, todos están recibiendo tratamiento preventivo y se les ha ofrecido la vacuna contra la meningitis tipo C, una profilaxis con la que no contaban los dos fallecidos. La prioridad, ha agregado el organismo, es "limitar al máximo la posibilidad de contagio de persona a persona".

Pesquisas

En paralelo, el ente de prevención de enfermedades también ha iniciado una investigación para determinar el origen de la enfermedad meningocócica.

"El meningococo lo podemos tener ahora mismo de forma asintomática, pero al hablar o toser podemos pasarlo a alguna persona cercana con la mala suerte de que desarrolle la infección", ha concluido Caylà.