Ha llegado la temporada alta de los estafadores. El auge de las compras desde el Black Friday hasta después de Reyes crea el caldo de cultivo perfecto para los delincuentes que operan en internet, que activan en estas fechas sus campañas más afinadas.
Desde los falsos avisos de paquetes que no llegan hasta las estafas vinculadas a la Lotería de Navidad, expertos y cuerpos policiales llevan semanas alertando de las principales modalidades, de las más sofisticadas y de cómo intentar esquivarlas. Trampas cada vez más perfeccionadas.
Cuidado con la Lotería
Las estafas vinculadas al sorteo de Navidad no son nuevas, pero se renuevan cada año y conviven los clásicos de toda la vida con versiones digitales mucho más sofisticadas.
Una de las más conocidas es el 'tocomocho', un timo clásico en el que alguien convence a la víctima de que le está vendiendo un décimo premiado --fingiendo no entender bien su valor o simulando necesitar dinero urgente-- cuando en realidad el billete es falso o no está premiado.
A este clásico se suman fraudes más modernos, como el del supuesto décimo premiado que llega por correo electrónico o mensaje de móvil, y para cobrarlo se exige un pago previo o la entrega de datos personales y bancarios.
También proliferan las páginas web falsas que imitan a la oficial de Loterías y Apuestas del Estado y cuyo único objetivo es robar datos bancarios.
Exemplo de estafa relacionada con la Lotería
El paquete que no llega
El fraude también se cuela por la vía de los envíos. El ejemplo más habitual es el del SMS o correo del paquete que no ha podido entregarse, que dirige a una web fraudulenta para robar datos personales.
A ello se suman correos que suplantan a empresas de mensajería y las tiendas online efímeras que ofrecen chollos imposibles y nunca envían el producto.
Captura de un mensaje fraudulento
Apelando a las emociones
En estas fechas también se detectan más casos de la estafa del falso familiar en apuros económicos y las falsas campañas solidarias que se aprovechan del aumento de la sensibilidad social en estas fechas.
Cómo esquivar las trampas
Ante este escenario, policías, expertos en ciberseguridad y entidades bancarias insisten en que la mejor herramienta sigue siendo la prevención y la información. No se trata solo de conocer las estafas, sino de adoptar pequeños hábitos que ayuden a detectar a tiempo el engaño y a minimizar sus consecuencias.
En este sentido, los Mossos d’Esquadra insisten en que las compras de Navidad se hagan siempre a través de los canales oficiales, evitando tomar decisiones bajo presión o urgencia.
Además de estas pautas básicas, tanto los cuerpos policiales como los expertos en ciberseguridad y las entidades bancarias recuerdan que no se debe llevar un papel con contraseñas o PIN en la cartera, y que es importante evitar claves demasiado evidentes, como fechas de cumpleaños o secuencias fáciles de deducir.
El auge de estafas por Bizum
Los Mossos también insisten en que ningún organismo oficial usa Bizum para hacer pagos o cobros inesperados, y ante una llamada que genere dudas, lo recomendable es no facilitar ningún dato personal, colgar y verificar la información contactando con la entidad o servicio oficial por otros canales.
Si un número aparece en pantalla y despierta sospechas, puede consultarse en Internet para ver si está relacionado con fraudes, y bloquearlo si se confirma que es fraudulento.
Asimismo, recomiendan que antes de realizar un pago en una web de comercio electrónico, conviene asegurarse de que es fiable y, si existe la opción, evitar hacer la compra a través de Bizum, ya que la transferencia es instantánea y es prácticamente imposible revertirla.
Cuidado con lo que se publica en redes
En paralelo, los Mossos d’Esquadra recomiendan ser prudentes con lo que se publica en redes sociales, sobre todo cuando se trata de información que puede revelar datos personales o patrimoniales, como presumir de haber ganado la lotería o de estar fuera de casa durante varios días.
También aconsejan evitar compartir datos sensibles, revisar la configuración de privacidad de los perfiles y practicar el llamado 'egosurfing', es decir, buscar el propio nombre en Internet para comprobar qué información aparece publicada y solicitar su retirada si se detecta que se han difundido datos sin consentimiento.
¿Y si somos víctimas?
En caso de ser víctima de una estafa, los cuerpos policiales recomiendan actuar con rapidez: llamar inmediatamente a la entidad bancaria para intentar bloquear una transferencia o revertir un cargo y presentar denuncia en la comisaría más cercana.
Porque, aunque las cifras oficiales puedan dar la impresión de que la ciberdelincuencia está contenida, el fraude digital sigue muy vivo y encuentra en la Navidad su terreno más fértil: más dinero en circulación, más compras y más distracciones.
