Captura de pantalla de un vídeo del despliegue de Mossos y Guardia Urbana en un local del Eixample de Barcelona
Treinta agentes irrumpen en un bar de la Diagonal en una inspección que destapa irregularidades laborales
El despliegue de Mossos y Guardia Urbana en un local con una docena de clientes se salda con irregularidades laborales y deficiencias acústicas
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Un operativo policial con unos treinta agentes de los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana irrumpió el pasado sábado por la noche en un bar musical de la avenida Diagonal, en el Eixample de Barcelona.
La actuación --censurada por fuentes del ocio nocturno por "desproporcionada"-- formaba parte de una inspección conjunta de empleo, seguridad ciudadana y normativa administrativa, y contó con apoyo del SEM y de Inspección de Trabajo.
En el momento de la entrada, el local —Bar San Basilio— estaba abierto y tenía alrededor de una docena de clientes consumiendo bebidas y shishas.
Irregularidades laborales
Según fuentes policiales, durante el control se identificó a tres trabajadores: un DJ, un empleado que atendía en la barra de forma "puntual" y un controlador de acceso.
Inspección de Trabajo constató que el negocio no disponía de registro de jornada y que ninguno de los empleados realizaba fichajes de entrada o salida.
Deficiencias acústicas y en videovigilancia
En la revisión administrativa se detectó que la última inspección del limitador de sonido, de mayo de 2025, constaba como desfavorable. Los agentes realizaron una prueba acústica y verificaron que la música del interior se escuchaba desde la vía pública, incluso con la puerta cerrada.
Cámara de vigilancia. Imagen de archivo
El local también contaba con cámaras de vigilancia sin el cartel informativo obligatorio, lo que supone una infracción en materia de protección de datos.
Clientes identificados y dos denuncias
El dispositivo incluyó la identificación de 13 clientes y se levantaron dos denuncias por tenencia de drogas y/o armas. La responsable del establecimiento fue informada de las irregularidades y firmó las actas correspondientes.
Fuentes del sector nocturno censuran la actuación por "desproporcionada" antendiendo al número de agentes movilizados y lamentan el daño reputacional que puede provocar en el sector.
