Pocos lo saben, pero en esta zona de Barcelona no se puede aparcar el coche: los vecinos están enfadados

Aparcar en Barcelona no es una tarea sencilla. El caudal de coches en las calzadas de la ciudad es muy alto, sobre todo en las horas puntas. Así pues, cuando es momento de estacionar, la competencia es mucha. Además, todo el mundo quiere intentar hacerlo gratis, sin pagar parkings o parquímetros. Es un objetivo difícil de conseguir.

Por otra parte, hay algunas zonas, delineadas con pintura verde, que están reservadas para los vecinos. Con la pertinente tarjeta, los residentes pueden dejar sus vehículos todo el tiempo que deseen. Por otra parte, los que no vivan en la zona podrán estacionar allí, pero solo durante una o dos horas, según lo indique la señal; además de pagar una tasa.

La municipalización del agua enerva a los vecinos de Sant Hilari Sacalm: "Aumento insultante del recibo"

Reservado para vecinos

Otra película es ya si hay una señal que impide el paso a aquellos que no sean vecinos. Se trata de una de forma circular, con una circunferencia roja y un relleno blanco, que prohíbe expresamente superarla a todos los que no residen allí. Es ilegal cruzarla. A diferencia de la línea verde, no se puede abonar una cantidad para pasar. Es una ley inexorable.

La policía en un aparcamiento EFE

No hay demasiadas zonas como estas en Barcelona pero, las que hay, deben ser respetadas. Las normativas de tráfico regulan la circulación de vehículos para tratar de generar un bienestar común. En este caso, es justo que los residentes no tengan ocupados los carriles que solo son para ellos. Es el caso de la carretera de les Aigües.

Zona concurrida

La mencionada ubicación está muy de moda. Una gran cantidad de personas acuden a caminar, correr o montar en bicicleta a diario. Con los ciclistas, según explica El Periódico, los vecinos tienen miedo de ser atropellados. Al pasear por el entorno natural, se ven adelantados por estos conductores con sus vehículos de dos ruedas a toda velocidad. Al haber descensos, el riesgo de accidente es real.

La carretera de les Aigües GOOGLE

No obstante, ese no es el principal motivo de la ira de los residentes. El problema es con los coches y con las motos, a razón de los estacionamientos. Las plazas para aparcar se quedan muy cortas para la gran afluencia de la zona, por lo que los visitantes superan límites que no deben para poder dejar sus vehículos.

Donde se pueda

Tras circular hasta el final de la calle Manuel Arnús y no encontrar huecos libres entre las plazas pintadas, giran a la derecha, hacia la carretera estrecha que lleva hasta la calle Maduixer. El problema es que ignoran la señal que impide exactamente hacer eso. Salvo a los vecinos.

De esta manera, cuando los residentes tratan de circular por esa zona, de curvas pronunciadas y doble sentido, se encuentran con coches aparcados. También, con la complicación de moverse. De hecho, un arcén no destinado para el estacionamiento estaba siendo utilizado para este fin. Así pues, una montaña de arena bloqueó la espontánea función que se le había aplicado.

Un incendio de vehículo en la A-2 corta la calzada y causa retenciones en los accesos a Barcelona

Problemas

La afluencia de la carretera de les Aigües por personas que se dedican a hacer deporte es normal. Es una zona natural, amplia y relajada. Es positivo que la gente tenga este tipo de hábitos. Sin embargo, el problema está en la falta de responsabilidad de aquellos que arriban a la zona con su vehículo propio, en lugar de a pie o mediante transporte público.

El enfado de los vecinos proviene de tiempo atrás y las quejas son constantes. Motivos tienen para ello, porque la mencionada carretera no es de circulación cómoda. Así pues, cuantos menos vehículos la empleen, mejor. En especial, si hay una limitación legal que impide rodar sobre ella a no ser que sea un colectivo concreto.