Ariadna Pons, primera española en recoger el premio European Yacht of the Year 2024

Ariadna Pons, primera española en recoger el premio European Yacht of the Year 2024

Vida

“No me gusta cuando me presentan como arquitecta naval mujer”

Ariadna Pons es la primera española en recoger el premio European Yacht of the Year 2024, el galardón más codiciado de la industria náutica mundial

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Ariadna Pons (El Masnou, 1991) ya soñaba de pequeña con diseñar yates y barcos de vela. “Creo que porque mis padres, regatistas aficionados, se conocieron navegando, y mi hermano y yo hemos navegado siempre con ellos, incluso cuando mi madre estaba embarazada”, recuerda. Tan obsesionada estaba con su futura profesión que, con once años, llegó a enviar una carta, en castellano, a la Universidad de Southampton, Reino Unido, la más prestigiosa en el ámbito de la arquitectura naval,  para pedirles que, por favor, le guardaran una plaza. Y desde allí, “alguna secretaria con buen corazón” le respondió que sí, que le guardaban la plaza, “pero que antes tenía que estudiar mucho y portarse muy bien”.

“No sé si estudié mucho ni si me porté demasiado bien, pero lo cierto es que lo conseguí”, se ríe Pons, que en 2015, tras sacarse la doble titulación en Ingeniería de Sistemas y Tecnología Marina y Arquitectura Naval en la UPC, se marchó a Southampton para cursar un máster en Yates y Embarcaciones de recreo.

Ariadna Pons

Ariadna Pons

El máster le abrió las puertas a lo mejor de lo mejor de la industria, y en 2017, después de presentar una candidatura abierta, logró incorporarse a la empresa de sus sueños, el astillero danés X-Yachts, que la fichó como diseñadora de interiores para sus oficinas en Hamble, Reino Unido. Allí se convirtió en la mano derecha de  Niels Jeppesen, uno de los fundadores, quien en 2022 le acabaría proponiendo abrir juntos su propio estudio de diseño de yates: Jeppesen & Pons. “La idea era hacer el mismo trabajo que hasta entonces: diseñar barcos, desde el concepto inicial, interior y exterior, hasta los dibujos de producción y el tipo de materiales que se utilizan en cada parte”, explica Pons. Dos años más tarde, lanzaron su primer velero diseñado en común, el Arcona 50, galardonado con el premio European Yacht of the Year 2024 en su categoría, lo que convirtió a Pons en la primera española en recoger el galardón más codiciado de la industria náutica mundial.

“Cada proyecto tiene diferentes ángulos de planteamiento, pero lo primero que tienes en cuenta al diseñar un barco es quién será el cliente final y para qué lo usará: ¿para ir de vacaciones con la familia? ¿Para ganar regatas? ¿Para las dos cosas? Cada barco tiene su personalidad”, afirma  la reconocida arquitecta naval, recién regresada a Inglaterra después de visitar el Salón Náutico 2025 en Barcelona. En el caso del Arcona 50, el objetivo era hacer un barco de cruising, es decir, de ocio, sin perder performance.  “A mí me recuerda a Anna Wintour, la veterana editora de Vogue, una señora con clase, que siempre va impoluta, pero con un carácter fuerte”, comenta. En el Arcona 50 esto se transmite mediante detalles como un diseño de proa más agresivo o su capacidad para coger velocidad, “aunque en su conjunto no es un barco extremado, sino amable y elegante, y es fácil de llevar entre dos personas si no te apetece competir. Está pensado para una persona que le gusta navegar pero que también quiere gozar y dejarse llevar”, concluye.

Ariadna Pons

Ariadna Pons

Jeppesen & Pons mantiene su sede en Reino Unido, donde residen ambos socios, aunque, como estudio de diseño con una clientela 100% internacional, podrían estar en Barcelona o en cualquier otra ciudad. “Quizás la principal ventaja es que, al estar tan cerca de la universidad de Southampton, tenemos más a mano una cartera de recursos humanos de calidad”, explica Pons.

La arquitecta está a punto de finalizar un nuevo proyecto, el JP40, un velero dirigido más específicamente a performance,es decir, a competir, con una estructura modular que permite al propio usuario añadir mediante add-on  otras estructuras para aportar confort a a la embarcación - módulo mesa, módulo nevera, modulo baño… - según sus necesidades.

“Alguna vez he dado  una charla o conferencia en la universidad y se me han acercado chicas para decirme:  “me ha gustado mucho, porque me he visto reflejada”, comenta Pons, admitiendo que la escasez de referentes femeninos en la industria naval es una realidad. Sin embargo, para ella esto no fue un problema. “Se trata de luchar por hacer lo que a uno le gusta”, dice.

Siendo mujer, es cierto que esta lucha implica tener que lidiar con personas con prejuicios y pensamientos anticuados, “como llegar a un sitio y que todo el mundo piense que soy secretaria o diseñadora de interiores, porque son los puestos más habituales ocupados por mujeres en el sector”, admite. Pero tampoco le gusta cuando la presentan como arquitecto naval “mujer”: “es como si la etiqueta de género tuviera algo que ver con mi profesionalidad, y eso, para mí, aún genera más exclusión. Quiero ser considerada una arquitecta naval a secas”, concluye.