Kike García, futbolista del Espanyol, salva la vida de un joven de 14 años tras sufrir un paro cardíaco: “Es mi héroe, mi Superman”

En la realidad, los héroes no llevan capas. Suena a tópico, pero es una verdad confirmada. Este fin de semana el navarro Kike García, delantero del Espanyol le dio una segunda oportunidad a un joven de años, Hugo.

Como si de volver a nacer se tratara, el joven, que disputaba un partido con la Escuela del Espanyol, se desplomó y entró en un paro cardíaco. Una situación que más de alguna vez se ha podido vivir en grandes estadios de fútbol.

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Concretamente, este episodio ocurre cuando el corazón deja de latir súbitamente, a menudo debido a una arritmia subyacente, que puede ser una condición genética. Aunque el riesgo es bajo, se estima en 1-3 por cada 100.000 deportistas jóvenes, ha habido casos notables como el de Christian Eriksen.

Gracias a la pronta reacción del jugador profesional Kike García y al cuerpo médico del Espanyol, Hugo puede contarlo. El delantero perico se ha convertido en el “ángel guardián” del joven tras salvarle la vida.

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Dicho incidente ocurrió mientras Kike García se encontraba entrenando en un campo contiguo al lugar donde Hugo estaba jugando. Según relata, Marina Tárraga, madre de Hugo, a los medios de comunicación, Kike reaccionó inmediatamente después de ver a su hijo caer a través de una marquesina. Ella lo describe como "el ángel de mi hijo".

Posteriormente, Hugo fue informado en el hospital de la gravedad de lo ocurrido: "me contaron cuando me desperté en el hospital que me había dado un paro cardiaco", recordó el joven.

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"Mi Superman"

A pesar de encontrarse aún en pleno proceso de recuperación, Hugo pudo conocer a su ídolo, Kike García. El joven se mostró emocionado y agradecido, describiendo al futbolista con admiración: "Me quedé flipando. Es mi héroe, mi Superman pero en la vida real". Hugo desde ese momento tiene un nuevo héroe.

Ahora Hugo se encuentra bien, pero no puede practicar lo que más le gusta: fútbol. Su madre, para hacer más llevadera su recuperación y que en su recuerdo quede un momento agradable, ha sido la cómplice de la sorpresa junto con la buena disposición del Club Perico de devolver la sonrisa a uno de sus jóvenes seguidores.

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El joven ha vivido una experiencia inolvidable conociendo a la plantilla del Espanyol, pudiendo pudo fotografiarse con los jugadores y llevarse a casa una camiseta firmada por su equipo.

Tras conocer a sus ídolos, el joven pudo agradecer al atacante blanquiazul su rápida reacción: “Hay que agradecerle a la vida. Y a ti, también”. En la misma línea, el médico que le reanimó, a través de una llamada, pidió perdón a Hugo, “porque a lo mejor para traerte de vuelta te tuve que romper alguna costilla”, pero nada como salvarle la vida.