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El próximo jueves la audiencia de Barcelona sentará en el banquillo a los seis hombres acusados de violar en grupo a una joven en diciembre de 2022. Los acusados habían llevado a la víctima a una nave industrial abandonada en Rubí (Barcelona) para perpetrar las agresiones sexuales. Por estos hechos los presuntos autores afrontan penas de entre 52 y 60 años.

La Fiscalía acusa a los seis procesados de cuatro delitos de agresión sexual con penetración, a cuatro de los detenidos como supuestos autores materiales de las acusaciones y a los otros dos en calidad de cooperadores necesarios, por permanecer en la nave como vigías, observando como se perpetraba la violación, sin impedirlo.

La víctima de la violación tenía 25 años cuando ocurrieron los hechos y padecía de un trastorno de afectividad y una discapacidad psíquica del 35%. La Fiscalía mantiene que los detenidos se aprovecharon del "clima de sometimiento" que crearon en la nave industrial, al ser un inmueble abandonado y alejado del núcleo urbano, con la intención de anular la capacidad de reacción de la joven.

Condenas

La Fiscalía pide que los acusados sean condenados, además de a las penas de prisión solicitadas, a cinco años de libertad vigilada tras su salida de la cárcel. También reclama que dos de ellos, de origen marroquí y en situación irregular en España, sean expulsados del país si obtienen el tercer grado o la libertad condicional antes de cumplir la pena íntegra.

El ministerio público solicita asimismo que indemnicen de forma conjunta con 80.000 euros a la víctima, que sufre un síndrome de estrés postraumático con ideas de muerte y autolesiones como consecuencia de los hechos.

Hechos

Según el escrito de acusación, la joven conocía desde 2021 a dos de los procesados, con los que había mantenido relaciones esporádicas, una de ellas con cierto vínculo afectivo. La noche del 26 de diciembre de 2022, uno de ellos la recogió en coche y la llevó hasta una nave industrial abandonada en Rubí, donde, para su sorpresa, la esperaban los otros acusados.

Durante el trayecto, la víctima dejó claro que no quería mantener relaciones sexuales, algo que volvió a repetir una vez en la nave, mientras los seis hombres la rodeaban y le decían que “era noche de celebración y tenía que cumplir”. Según la Fiscalía, los acusados comenzaron a tocarla pese a su negativa, mientras ella lloraba y pedía que la dejaran en paz.

A continuación, fue agredida sexualmente por dos de los hombres, mientras los demás observaban. Después, otros dos también la violaron, “prescindiendo de la voluntad y consentimiento de la víctima”, que continuaba llorando, según sostiene la acusación.

Tras los hechos, uno de los acusados llevó a la joven de vuelta a su casa y se marchó. La Fiscalía subraya que en ningún momento prestó consentimiento a las prácticas sexuales, y que no pudo evitarlas por la situación de miedo y angustia en la que se encontraba, rodeada de seis varones en un lugar aislado y abandonado.