La víctima de la riada en Sant Quintí es un niño de 11 años, su padre sigue desaparecido

Cataluña vivió este domingo una jornada negra marcada por las lluvias torrenciales. El teléfono de emergencias 112 registró 616 llamadas hasta las 20:15 horas, lo que dio lugar a la apertura de 362 expedientes vinculados a las intensas lluvias en la comunidad.

La peor noticia llegó con la desaparición de dos personas, después de que su coche fuese arrastrado por un torrente de agua en Sant Quintí de Mediona (Alt Penedès, Barcelona). Poco después del aviso, los Bombers de la Generalitat localizaron el cuerpo sin vida de uno de los dos ocupantes del vehículo. 

Según confirmó la consellera de Interior y Seguridad Pública, Núria Parlon, se trata de un menor de entre 11 y 12 años, cuyo cadáver apareció en el río Bitlles, a su paso por Sant Pere de Riudebitlles (Barcelona).

Según confirmó la consellera el niño viajaba con su padre en el coche que fue arrastrado por la crecida súbita de la riera de Sant Quintí de Mediona. El hombre continúa desaparecido y su búsqueda se ha prolongado durante toda la noche. 

Un operativo sin descanso

Más de 87 efectivos de Bombers, apoyados por una veintena de Mossos d’Esquadra, han trabajado en la zona con drones, perros rastreadores, submarinistas y vehículos especializados. Hasta la llegada de la noche también se utilizó un helicóptero.

El alcalde de Sant Quintí, Bernat Catasús, explicó en TV3 que el coche apareció destrozado en el fondo de un barranco y que el caudal de la riera llegó a subir hasta dos metros y medio en cuestión de minutos.

Según testigos, el conductor habría decidido cruzar la riera pese a las recomendaciones de no hacerlo y se vio sorprendido por la crecida repentina. La alerta se dio sobre las 18.30 horas, cuando se informó de que un coche estaba siendo arrastrado por el agua con dos personas en su interior.

Más de 100 litros por metro cuadrado

La riera de Sant Quintí ha sido una de las zonas más afectadas por las tormentas, con registros de más de 100 litros por metro cuadrado en algunos puntos del entorno metropolitano de Barcelona. El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lamentaron la tragedia y expresaron su pésame a la familia a través de redes sociales.

Parlon, por su lado, subrayó que, aunque las alertas del ES-Alert son útiles para avisos muy concretos, “no siempre son el sistema más adecuado” porque los servicios meteorológicos no pueden anticipar con exactitud total la intensidad de cada episodio. “A lo largo del día se ha estado avisando a la población”, defendió.

Más de 600 llamadas

Las llamadas al teléfono de emergencias 112 llegaron a las 616 antes de las 20:15 horas de este domingo. Según informó el 112 en X, la mayoría de las comunicaciones procedieron de las comarcas del Vallès Occidental (Barcelona) con un 32,45%, seguidas del Baix Llobregat (18,79%), Barcelonés (14,01%), Bages (11,35%) y la Selva (8,51%).

Por su parte, los Bombers de la Generalitat gestionaron hasta 118 nuevas intervenciones entre las cinco y las siete de la tarde, concentradas sobre todo en las áreas metropolitanas norte y sur, relacionadas sobre todo con inundaciones y caída de árboles.