Se vende la casa de ‘Ocho apellidos catalanes’: una mansión de 1.300 metros cuadrados a más de 4 millones de euros CRÓNICA GLOBAL
Se vende la casa de ‘Ocho apellidos catalanes’: una mansión de 1.300 metros cuadrados a más de 4 millones de euros
Además de la vivienda principal, la finca cuenta con una masía de masoveros
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Hay casas que son parte de la historia del cine: la de Pesadilla en Elm Street, la de El exorcista, la de El Resplandor… El cine español también tiene las suyas. El chalet de Casa en Flames ya ha pasado a ser reconocido por muchos y, hace unos diez años, la de Ocho apellidos catalanes también llamó la atención.
La cinta, estrenada en 2015, fue la secuela de Ocho apellidos vascos, una de las películas más taquilleras del cine español. Ambas comedias abordaban los estereotipos culturales entre distintas regiones del Estado, jugando con las diferencias entre norte y sur, primero con el País Vasco y luego con Cataluña. Pero eso ya es sabido.
El caso es que estas películas fueron rodadas, en parte, fuera de los platós y para Ocho apellidos catalanes, su director, escogió una fantástica casa ubicada a 20 minutos de Girona, en Llagostera.
No era una vivienda cualquiera, la finca ha sido objeto de distintos rodajes a lo largo de los años, y además ha acogido a diversas personalidades públicas, desde la diva de Hollywood Ava Gardner a, Don Juan de Borbón, pasando por el ex primer ministro canadiense Pierre Trudeau. Una espectacular casa que, ahora, ha salido a la venta por más de cuatro millones de euros.
Una finca de más de 1.000 metros cuadrados
La propiedad dispone de una superficie construida de 1.332 metros cuadrados. En todo este espacio, además de la vivienda principal, hay una construcción típica catalana: la masía de masoveros, un tipo de construcción tradicional catalana que servía como residencia para los campesinos que trabajaban las tierras a cambio de una parte de la cosecha o un salario.
El acceso a la vivienda principal se realiza a través de un amplio hall que conserva las arcadas originales. En la planta baja se encuentran distintas estancias: un salón, un despacho con biblioteca, un comedor y una cocina equipada con despensa. Junto a la escalera que lleva a los pisos superiores hay una bodega de dimensiones considerables.
Cómo es la casa de 'Ocho apellidos catalanes'
La primera planta alberga dos salones adicionales, una sala de piano y cinco habitaciones. Una de estas habitaciones conecta directamente con una edificación anexa, que cuenta con su propia cocina, comedor y salones independientes. Esta conexión permite que la vivienda se utilice de forma unificada o secciones separadas según necesidad.
En la segunda planta, antiguamente destinada al servicio, hay una sala de billar, varias habitaciones pequeñas, cuartos de baño y una terraza amplia desde la que se pueden observar los terrenos colindantes e incluso el mar en días despejados. Esta planta conserva la distribución típica de las viviendas que incluían estancias diferenciadas para el personal doméstico.
Los espacios exteriores de la finca se dividen entre dos patios, uno delantero y otro trasero. En el patio posterior se encuentra la piscina. El terreno, que rodea las edificaciones, presenta potencial de uso agrícola y forestal. La extensión y configuración del terreno permiten distintos tipos de aprovechamiento, desde actividades rurales hasta uso residencial exclusivo.
Los materiales originales, como las vigas de madera y suelos de piedra, se han conservado en distintos espacios del edificio principal. La distribución funcional incluye zonas de descanso, trabajo y ocio, integradas en un conjunto arquitectónico que mantiene elementos de la construcción tradicional catalana. Los interiores han sido utilizados tanto para residencia como para rodajes, sin que se hayan realizado reformas que alteren la estructura original.
Cuánto cuesta
Todo esto, más la historia de cine que le rodea ha hecho que, ahora que ha salido al mercado, se venda por un precio más que elevado: más de cuatro millones de euros.
Su comercialización está en manos de una agencia especializada en propiedades singulares, que, además de sus características, resalta su emplazamiento y su historia.
Cómo llegar
La finca está muy bien comunicada. Llagostera es uno de esos pueblos con encanto que está a un paso de la Costa Brava y a otro de la capital de la provincia, Girona. Pero es que Barcelona tampoco queda muy lejos.
Se tarda apenas una hora y cuarto en llegar al municipio desde la ciudad condal. Basta con tomar la autopista AP-7, ahora gratuita, y tomar la salida hacia Llagostera que enlaza con la C-65. El camino es más que fácil. Poder comprar la casa depende del bolsillo de cada uno.
