Inundaciones en el hospital de Vilafranca del Penedés durante las precipitaciones provocadas por el temporal en la provincia de Barcelona, a 12 de julio de 2025
Salud desaloja el Hospital de Vilafranca para reparar los daños por la inundación de la DANA
El SEM traslada la mayor parte de los 71 pacientes al Hospital Residència Sant Camil, en Sant Pere de Ribes, para que continúen con su ingreso
El hospital comarcal, cuyo sistema eléctrico ha quedado inutilizado, permanecerá cerrado varias semanas
Otras historias: Los bomberos buscan a dos desaparecidos por la DANA, arrastrados por el río Foix en Cubelles (Barcelona)
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Desalojo. El Departamento de Salud prepara la evacuación de los ingresados en el Hospital Comarcal del Alt Penedès, ubicado en Vilafranca del Penedès (Barcelona). Son 71 pacientes que serán traslado a otros centros sanitarios mientras este permanezca cerrado durante varias semanas.
¿El motivo? Las lluvias torrenciales asociadas a la DANA de este sábado, que han provocado graves inundaciones, como avanzó este medio. El sistema eléctrico del edificio ha quedado inutilizado y los generadores no permiten cubrir la demanda en su totalidad, cosa que obliga a desalojar las instalaciones durante varias semanas.
Derivados a otros hospitales
La consellera de Salud, Olga Pané, lo ha anunciado este domingo, asegurando que el centro estará cerrado "dos o tres semanas" y que las inundaciones no han afectado directamente a ninguno de los ingresados.
El grueso de los pacientes serán asumidos por el cercano Hospital Residència Sant Camil en Sant Pere de Ribes. El resto, serán trasladados a otros hospitales de Bellvitge, Igualada, Sant Boi y Viladecans, ha explicado en el hospital comarcal.
Inundaciones en el hospital de Vilafranca del Penedés durante las precipitaciones provocadas por el temporal en la provincia de Barcelona, a 12 de julio de 2025
Dispositivo complejo
El Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) prepara un dispositivo con 10 unidades movilizadas para acometer la evacuación. Fuentes conocedoras aseguran que el plan ha obligado a movilizar a personal en periodo de descanso, precisamente en fin de semana, y advierten de la complejidad del dispositivo.
El hospital se ha quedado a oscuras por la caída de un muro que ha provocado un fallo eléctrico, y los quirófanos y los laboratorios han quedado inundados. El centro sanitario comarcal primero ha tenido que detener la actividad urgente y dejar de admitir pacientes. Ahora, se ve obligado a dejar de dar servicio.