
Diferentes cafés
Así piden los catalanes un carajillo en Cataluña: en el resto de España no lo entienden
La lengua catalana nos sorprende con sus particulares palabras para definir algunos conceptos
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La lengua catalana es una joya lingüística que encierra siglos de historia, cultura y resistencia. Hablar catalán no es solo usar palabras diferentes, es sumergirse en una manera única de ver el mundo, con matices y expresiones que no siempre encuentran traducción. Su riqueza léxica, su musicalidad y su capacidad para adaptarse a los tiempos sin perder su esencia la hacen una lengua viva y poderosa.
Además, este idioma es símbolo de identidad y pertenencia. Es una lengua que une a personas de diferentes territorios, con acentos diversos pero con un corazón común. En cada refrán, en cada "bon dia" y en cada canción popular se refleja el alma de una comunidad que ha sabido mantener y celebrar su idioma frente a las adversidades.
La palabra catalana para decir carajillo
¡Ponme un carajillo, por favor! Esto bien lo podríamos escuchar en algunos bares, pero ¿y en Cataluña cómo lo diríamos? La palabra exacta sería cigaló.
Es una bebida que combina café y alguna bebida alcohólica, como coñac, ron, anís, orujo o whisky. Generalmente, se sirve en un vaso pequeño tipo chupito y se toma caliente o frío con hielos. Es típico en España y en varios países hispanoamericanos, como Colombia, donde se suele elaborar con ron o brandy; en Cuba, donde se suele elaborar con ron; y algunas áreas de México, donde es típico usar Licor 43, mezcal o un licor de café tipo Kahlúa o Tía María. En Venezuela se conoce como café envenenao y se suele hacer con ron, brandy, miche andino o cocuy.

Carajillo
Origen del cigaló
En Cataluña es conocido como cigaló, como ya hemos mencionado, aunque este término, surge de antes de la Guerra Civil. Se refería, específicamente, al vaso de licor donde se servía el café; y que el cliente bebía uno después del otro, en vez de mezclarlos.
Tanto en catalán como en castellano, la denominación de esta bebida es un diminutivo para el falo masculino: cigala y carajo respectivamente. Según una falsa etimología atribuida al escritor Josep Maria Espinàs, provendría de los trabajadores de la ciudad de Barcelona que en el bar pedían 'una copa i un cafè que ara guillo' (una copa y un café, que ya me voy). De ahí el apócope 'caraguillo' y su posterior desviación fonética.
Otras curiosidades sobre la palabra
Existen dos maneras de preparar un carajillo: vertiendo directamente el licor sobre el café o bien prendiendo el licor en una taza vacía y vertiendo el café encima. Gracias a que ciertos licores tienen una densidad relativa diferente al café, se puede separar por capas. En Cataluña, por ejemplo, suele presentarse en su forma más sencilla de café con brandy (sin quemar) y con el azúcar aparte, para que el consumidor lo añada a su gusto.
El carajillo, que es básicamente café con alcohol, tiene muchos equivalentes en otras culturas: el caffè corretto italiano, que tradicionalmente se hace con café y grappa; el gunfire británico, hecho con té negro y ron; el karsk escandinavo, hecho con café y whisky; el café com cheirinho portugués, que es café con brandy u otro aguardiente; etc.
Existen varias marcas en el mercado de esta bebida ya preparada, como por ejemplo: Auténtico Corajillo, Roca Carajillo, Carajillo Frontal o Melic. Estos carajillos preparados han tenido un importante auge en mercados de habla hispana, como en México.