Condenan a prisión permanente al "monstruo" que mató a dos ancianos en Barcelona
- El jurado popular consideró probado que el acusado asesinó al matrimonio para encubrir que les había estafado y robado dinero y joyas
- En relación: El fiscal califica de "monstruo" al hombre que asesinó a dos ancianos en Barcelona en 2019
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El tribunal de jurado de la Audiencia de Barcelona ha condenado a dos penas de prisión permanente revisable al hombre que asesinó a un matrimonio de ancianos en 2019 en Barcelona.
Según quedó probado en el juicio, los mató con el objetivo de encubrir que les había estafado y robado dinero y joyas.
Según el fallo, al que ha tenido acceso Efe, la sentencia condena al hombre por cada uno de los dos asesinatos, así como a indemnizar al hijo y a las nietas de las víctimas con cuantías que suman 250.000 euros.
Asesino y estafador
La sentencia, que ha estimado la petición de doble prisión permanente revisable solicitada por la fiscalía, se ha dictado tras el veredicto del jurado, que le declaró culpable en octubre.
Según recogió el jurado popular en su veredicto, el acusado actuó tras ganarse la confianza del matrimonio de ancianos con el objetivo de robarles y estafarles. Por ello, además de por el doble asesinato, el hombre también ha sido condenado por el delito de estafa.
Se ganó la confianza del matrimonio
De acuerdo con el escrito de acusación del fiscal, el acusado trabajaba como comercial del sector de productos relacionados con la salud y el bienestar de personas de la tercera edad.
El ministerio público sostiene que, desde al menos marzo de ese año, comenzó una relación profesional con este matrimonio, lo que hizo que asistiera con frecuencia al domicilio de la pareja, de la que fue ganándose su confianza.
Alevosía y ensañamiento
El fiscal detalla que, tras acabar con la vida del matrimonio de ancianos, el acusado se apoderó de joyas y de oro que, después, vendió en un local de compraventa, algunas de las cuales fueron reconocidas por el hijo del matrimonio asesinado durante el juicio celebrado en la Audiencia de Barcelona.
Según el ministerio público, el acusado cometió los dos asesinatos con alevosía y ensañamiento, aprovechándose de la vulnerabilidad de los ancianos, a los que atacó de manera "sorpresiva".