‘Bubito’, el estibador ejecutado en Montgat, recibió amenazas desde Colombia
- Un blog controlado desde una cárcel de Bogotá avisó a David C. de que irían "a por él"
- Más información: El nuevo presidente del Puerto se estrena con la ejecución de un estibador
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David C., el histórico estibador del Puerto de Barcelona ejecutado en Montgat (Barcelona), había recibido amenazas desde Colombia. Bubito, como se conocía a este exportuario en la Barceloneta, de donde era originario, fue señalado públicamente a través de una web desaparecida, cuyo contenido se atribuye a los cárteles colombianos.
Así lo han explicado fuentes cercanas al asesinato de Bubito, que tuvo lugar el viernes pasado a primera hora de la mañana en la cafetería donde solía desayunar después de dejar a sus hijos en el colegio. Según estas voces, el padre de familia "conocía perfectamente que le tenían inquina porque lo habían aireado a los cuatro vientos por internet".
Una práctica que, si bien es "habitual" en estos entornos criminales, "lo preocupante es que se haya materializado en España", apuntan voces policiales.
Un blog presidiario
Y es que quien le cogió manía no tenía reparo en publicarlo online. En un blog público dedicado a lo que se conoce como sapos, chivatos en el argot criminal, aparecía una imagen en la que se superponía una fotografía del Puerto de Barcelona -donde trabajó David- junto con el rostro de varios estibadores y trabajadores. Entre ellos, él. Se trata de la imagen que ilustra este artículo, con los retratos de los señalados pixelados para preservar su identidad.
En la entrada en esta bitácora, ya desaparecida -como el resto del contenido-, los autores, anónimos, avisaban a Bubito de que iban a por él. La amenaza la conoció su entorno y llegó también a las filas del Futsal Barceloneta, entidad deportiva de la que era presidente.
Se sabe que el blog lo actualizaba un grupo delictivo con algunos de sus miembros encarcelados en La Picota, una cárcel situada en Bogotá (Colombia), que se ha situado en la polémica por estar corrompida por los cárteles de la droga.
En la misma línea, y según fuentes policiales, hace pocos meses un empresario colombiano de dudosa reputación murió abatido a tiros. También se le relacionaba con el tráfico de cocaína entre Colombia y España, con los puertos de Barcelona y Valencia como puertas de entrada.
Un "benefactor"
Quizá por todo ello, el veterano estibador -no ejercía desde hacía una década- pasó una temporada en Oriente Medio, donde se había construido una mansión y donde las fuentes consultadas sospechan que blanqueaba todo el dinero que obtenía de la coca.
La amenaza que le dirigieron desde La Picota permeó también en el entorno del club de fútbol sala que presidía, el Barceloneta, causando temor entre los jugadores y el cuerpo técnico.
En cualquier caso, el intento de intimidación no quebró el halo de influencia que desprendía el exestibador -que en la actualidad se había reafincado en una lujosa torre en Alella-, al que muchos veían como un benefactor. "Se sospechaba de dónde venía el dinero del club para traer a jugadores, incluso extracomunitarios, sin cantera ni estructura alguna, quién pagaba los trajes y zapatillas Nike a los chavales, pero nadie decía nada".
Amistad con el director general de la FCF
Esa aureola de "benefactor del barrio" apenas se resquebrajó con las amenazas que llegaban desde Colombia. "Todo el mundo sabía, pero nadie decía nada", detallan las mismas fuentes.
Esa falta de control, tolerancia incluso, con la vertiente social de Bubito llegó hasta la misma Federación Catalana de Fútbol (FCF). El entorno del finado admite que éste era amigo de José Miguel Calle, director general del organismo federativo, y uno de los pesos pesados de la junta de Joan Soteras.
En el fútbol, como su amigo Valentín Moreno
Quizá por ello, la FCF emitió una nota de duelo [esta], cuando en otros casos de fallecimiento de presidente de un club no lo ha hecho. Como explicó Crónica Global, la reseña de condolencias ha provocado marejada en el deporte catalán.
De hecho, se trata de un homenaje póstumo idéntico al que publicaron clubes de fútbol de Sant Adrià de Besòs (Barcelona) cuando falleció Valentín Moreno, el llamado asesino de la Vila Olímpica, del mismo modus operandi: una ejecución en la calle a tiros. Bubito y Moreno eran "amigos", ambos eran temidos en el deporte base catalán --aunque gozaran de cierta fama-- y los dos han terminado asesinados en, cree la policía, ajustes de cuentas.
Los cuerpos policiales temen un "contraataque"
Con David ejecutado, el Futsal Barceloneta se ha quedado sin su "benefactor", aunque el miedo por esas amenazas veladas también se ha ido con él. Ahora, sin embargo, quienes han puesto todos los sentidos en este caso son los cuerpos policiales. Fuentes consultadas temen pronto un "contraataque".
"Toda acción tiene su reacción, y tememos que Cataluña volverá a ser el campo de batalla de la guerra abierta entre clanes", auguran. ¿El motivo? El control del puerto de Barcelona. Una disputa que, incluso, ha cruzado el charco y se está saldando vidas al otro lado, en Colombia, de donde parte la cocaína que llega a la capital catalana.
Según indican, Bubito era uno de los hombres fuertes en la infraestructura portuaria de Barcelona. Sus años como estibador le permitieron conocer cómo funcionaba el laberinto de contenedores. Nadie mejor que él conocía los escondites y entresijos de aquel lugar. Sin embargo, "la ambición le pudo al sentido común". No se conformó con su trozo del pastel y cruzó ciertas líneas rojas. Además, se le ha tachado de confidente, extremo que, en caso de ser verdad, en el hampa se paga con la vida.