Cataluña sigue en situación de sequía, pero no por falta de lluvias, sino por escasez de agua en los pantanos. Los embalses han ganado seis puntos gracias a las precipitaciones de las últimas dos semanas, pero este miércoles se sitúan en el 32,4% de su capacidad. Es una cantidad insuficiente para salir del estado de alerta. El dato positivo es que hay reservas hasta marzo.
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha dicho en el Parlament que, en caso de que no llueva más, Cataluña entraría en marzo en fase de excepcionalidad. Y ha admitido que las recientes lluvias han dado un respiro. Aun así, si bien las reservas han aumentado hasta los 225.000 millones de litros, hay un pantano cuyo nivel de agua está bajando en los últimos días: el de Susqueda.
Riudecanyes: de estar seco a llegar al 15%
El pantano de Susqueda (Osor, Girona) está hoy al 26,7% de su capacidad, después de superar el 27% en días anteriores, según los datos facilitados por la Agencia Catalana del Agua (ACA). Sin embargo, es el más grande de los nueve embalses de las cuencas internas: caben en él 233 hectómetros cúbicos (233.000 millones de litros).
En el lado opuesto, el embalse más beneficiado por las lluvias es el de Riudecanyes (Tarragona), pues ha pasado del 1,4% de su capacidad al 15,39% en dos semanas. Hoy contiene 0,8 hectómetros cúbicos. Por no hablar del pantano de Foix (Castellet i la Gornal, Barcelona), el más pequeño y el único que está al 100% (3,74 hectómetros cúbicos).
Sau, al 29%
Por otra parte, el embalse de la Baells, en Cercs (Barcelona), está al 56,74% de su capacidad. Le siguen el de Sant Ponç, en Clariana de Cardener (Lleida), con el 41,43%, y el de la Llosa del Cavall (33,29%), en Navès (Lleida).
Por último, figuran el icónico pantano de Sau (29,07%), en Vilanova de Sau (Barcelona); el embalse de Darnius Boadella (17,81%), y el de Siurana (6,26%), en Cornudella de Montsant (Tarragona).
El sistema Ter-Llobregat
Por lo que respecta a los cinco embalses del sistema Ter-Llobregat, que abastecen a Barcelona y su área metropolitana y a Girona y su entorno (unos seis millones de catalanes), se sitúan por encima del 34% de su capacidad.
Se trata de los pantanos de Sau, Susqueda, la Baells, la Llosa del Cavall y Sant Ponç, que casi doblan la cantidad de agua que contenían hace un año.