Los fregaderos atascados son un problema doméstico común que pueden generar molestias y retrasos en las tareas diarias. Generalmente, una pica se atasca cuando los desechos de comida, grasa, jabón o cabello se acumulan en las tuberías, obstruyendo el flujo normal del agua. Con el tiempo, esta acumulación puede volverse lo suficientemente densa como para impedir por completo el paso del agua.
Para evitar que el fregadero se atasque, es recomendable no verter aceite, comida grande o restos de sólidos en él. Realizar limpiezas preventivas como verter, periódicamente, agua caliente o una mezcla de bicarbonato y vinagre, también es una buena práctica.
El truco para desatascar el fregadero
El bicarbonato de sodio es un producto muy fácil de encontrar, disponible en la mayoría de los supermercados a un precio asequible. Además de ser útil para desatascar inodoros, es excelente para prevenir obstrucciones más graves. Combinado con vinagre, otro ingrediente común en la cocina, es todo lo que necesitamos para despejar las tuberías del baño o la cocina.
El primer paso consiste en verter agua hirviendo en el desagüe. Para esto, podemos usar un hervidor o una olla, permitiendo que las altas temperaturas disuelvan los residuos orgánicos más recientes. Luego, debemos echar una taza de bicarbonato de sodio, directamente, en el desagüe y ayudarnos de un embudo, para asegurarnos de que llegue hasta las tuberías.
Desagüe
Después de dejarlo actuar unos minutos, verteremos una taza de vinagre blanco. Esto generará una reacción que producirá espuma y un sonido efervescente. Este sonido es una buena señal, ya que indica que la mezcla está trabajando para eliminar los residuos que causaban el atasco. Dejaremos reposar la mezcla entre unos 10 y 15 minutos.
El bicarbonato y el vinagre habrán eliminado la mayor parte de los restos orgánicos, pero para eliminar cualquier residuo suelto restante, es recomendable verter más agua hirviendo. La mejor manera de comprobar si el problema está resuelto es echar agua mientras y observar si fluye sin dificultad por el desagüe.
El poder del vinagre en la limpieza
El vinagre es uno de los productos más versátiles y efectivos para la limpieza del hogar, gracias a sus propiedades ácidas que lo convierten en un potente limpiador natural. Su bajo costo, accesibilidad y capacidad para desinfectar hacen que sea una excelente alternativa a los productos químicos comerciales, además de ser ecológico y seguro para el uso diario.
Desinfecta: el vinagre, especialmente el blanco, tiene propiedades antibacterianas, lo que lo hace ideal para limpiar superficies en la cocina, el baño y otras áreas de la casa. Es efectivo para eliminar gérmenes y bacterias comunes.
Elimina la grasa: al ser ácido, es excelente para descomponer la grasa acumulada en superficies como estufas, hornos y campanas extractoras. Con solo mezclarlo con agua y aplicarlo sobre la grasa, se puede eliminar de manera sencilla.
Neutraliza los olores: es útil para eliminar olores de refrigeradores, microondas, contenedores de basura o, incluso, en tejidos, como alfombras y tapicerías.
Elimina las manchas: se aplica, directamente, o mezclado con bicarbonato de sodio, ayuda a eliminar manchas de vino, café o comida.
Niño con la camiseta manchada
Limpieza de vidrios y espejos: es ideal para dejarlos brillantes y libres de manchas. Mezclado con agua y aplicado con un paño o papel, deja las superficies de cristal limpias y relucientes.
Suavizante natural para la ropa: usar vinagre en la lavadora, en lugar de suavizante comercial, no solo deja la ropa suave, sino que también ayuda a eliminar residuos de detergente y mantiene los colores vivos.