Buscar el origen de los apellidos puede llevar a lugares insospechados. A los romanos, al imperio otomano, a la religión o a historias muy dramáticas, cuando no oscuras, que pueden sorprender a sus portadores.
Uno de estos apellidos trágicos, por llamarlos de algún modo, se convirtió en popular hace una década, cuando el jugador de la Masía Gerard Deulofeu se convirtió en titular del primer equipo del FC Barcelona.
Este es el origen de los apellidos
A pesar de que ya el apellido no tiene nada que ver con su origen, el contenido es de lo más trágico. Solo hace falta atender un poco.
Que no se ofendan los expertos en heráldica y antroponimia. Sabemos que normalmente una exploración exhaustiva de nuestros apellidos exige tiempo y dedicación, pero algunos tienen orígenes fácilmente deducibles gracias a sus significados muy evidentes. Y Deulofeu es un claro ejemplo.
¿Qué significado tiene?
Si es de sobras conocidas que los apellidos acabados en -ez, como González o Martínez, indican que son ‘hijos de’ Gonzalo o Martín, respectivamente, otros, como Deulofeu reflejan cierto origen.
Para dilucidar el origen de este nombre familiar, solo hace falta descomponerlo por palabras: Deu lo feu. En castellano, Dios lo hizo.
Bebés sin padre
Si atendemos a la fe cristiana, cualquier hijo o hija lo es de Dios, pero en realidad no se aplicaba a cualquiera, solo a unos bebés en concreto: aquellos cuyo padre era desconocido. De esta manera, el apellido de la madre quedaba relegado a un segundo lugar, como si nada hubiera pasado. Historias de otra época.
Pero estos no son los únicos bebés a los que se le asignaba este apellido, aquellos pequeños que eran abandonados, desamparados, y eran acogidos en orfanatos también acababan portando este particular nombre familiar.
Así es su equivalente en castellano
La idea de esos tiempos en los que parecía que uno debía ocultar cierta procedencia, era disimularlo al máximo posible para poder asegurar una identidad a los pequeños. Claro que eso, de alguna manera, no hacía más que recordar de manera constante y para toda la vida que los Deulofeu eran huérfanos.
Este apellido, en cualquier caso, es típicamente catalán. La versión castellana del mismo suena bastante diferente, pero sigue la línea. Los Diosdado señalaban directamente que fueron dados a Dios y por Dios. Y, curiosamente, también hubo una famosa con ese apellido de origen particular, la famosa actriz Ana Diosdado.
¿Qué otras versiones existen?
Pero estos no son los únicos nombres de familia que indican la carencia de padres. Un término más crudo, Tirado, señala la falta de linaje del niño en cuestión. Lo mismo ocurre con apellidos como Expósito, Incógnito o Blanco.
Luego encontramos apellidos que denotan que los niños fueron dejados cerca de iglesias u otros lugares eclesiásticos: De la Iglesia, San Juan, De Dios Cruz, Iglesias o De María, por ejemplo.
Nombres de lugares
En algunas ocasiones, para ocultar el abandono, se les otorgaban apellidos geográficos, como Salamanca, Bilbao o Sevilla, e incluso nombres nacionales como España. También se empleaban apellidos locales para pasar inadvertidos.
En Aragón, se les confería el apellido Gracia o de Gracia, por considerar que sobrevivían gracias a la benevolencia divina. Pero aún nos queda un segundo apellido catalán por explorar en este artículo.
Donadeu, ¿el antónimo?
Donadeu es un apellido catalán que podría ser el antónimo de todos estos. Tiene origen en la composición latina donum Dei, es decir, don de Dios.
Algunos expertos aseguran que se les daba este apellido a los niños largamente deseados por sus padres. Es una teoría, no obstante, que cuesta que se sostenga si tenemos en cuenta que lo habitual es que un niño herede el apellido paterno. Así que otros expertos apuntan a que Donadeu era el apellido que se otorgaba a los pobres infantes de padres desconocidos.