La Policía Nacional investiga tres famosos clubs de striptease de Barcelona por, presuntamente, desplumar cantidades desorbitadas a sus clientes utilizando sus tarjetas de crédito a sus espaldas, según ha podido saber en exclusiva Crónica Global.
La presunta trama afloró seis meses atrás, después de que un cliente nórdico perdiera 300.000 euros tras frecuentar durante tres noches consecutivas uno de estos famosos prostíbulos en la capital catalana.
Al parecer, los clubs habían abusado de su tarjeta de crédito para cobrarle la estratosférica cantidad.
Investigación en curso
Según ha podido saber este medio, los Mossos d'Esquadra ya habían iniciado una investigación por hechos similares durante el Mobile World Congress (MWC) de 2023, tras detectar supuestas estafas en dos conocidos prostíbulos de la capital catalana: París La Nuit y Loreto Private Experience, vinculado con la histórica sala Bacarrá del Turó Park, que cerró ayer y reabrirá como disco latina.
Esta investigación de la policía catalana confluyó con la capitaneada en la actualidad por la Policía Nacional, cuerpo policial que recogió la denuncia del extranjero y que ahora indaga las dudosas prácticas de otros tres conocidos clubs.
A preguntas de Crónica Global, la Policía Nacional se limita a confirmar que "hay una investigación en curso" y que sólo uno de los casos está ya judicializado, por lo que rechazan aportar más información al respecto.
'Mordidas'
Como explicó este medio en 2016, el París La Nuit es una de las salas donde se pagaban presuntamente mordidas a personas que traían clientes.
Estas prácticas, condenadas por otros locales de la noche catalana, las avaló el TSJC en un fallo contra Bacarrá y New Bacarrá en 2021.
Cargos sin su consentimiento
En la investigación actual, otras voces consultadas por este medio señalan que el modus operandi que siguieron para vaciar la cuenta al cliente nórdico coincide con el seguido en otros locales de alterne de la capital catalana.
En los casos investigados, las trabajadoras, con el supuesto beneplácito de los responsables, presuntamente habrían aprovechado que los clientes se encontraban bajo el efecto del alcohol o las drogas, con sus facultades mermadas, para hacer cargos en sus tarjetas sin su consentimiento. De forma paulatina hasta los citados 300.000 euros.
'Contactless' o con el PIN
Así, cargaban elevadas sumas de dinero utilizando el contact less de su tarjeta de crédito o introduciendo el PIN, que en el momento en el que el cliente pagaba una copa anotaban o memorizaban.
Las mismas fuentes sostienen que, en el caso del cliente nórdico, las chicas presuntamente efectuaron transferencias de más de 10.000 euros en periodos muy cortos de tiempo, en concreto, en intervalos inferiores a 15 minutos.
Sector en zozobra
La investigación ha sacudido el sector de la noche catalana. Es así porque han vuelto unas prácticas -el robo a clientes- que se creían desterradas en el ocio para adultos. El doble golpe de Mossos d'Esquadra, primero, y de la Policía Nacional, ahora, pone negro sobre blanco una metodología criminal que se creía erradicada.
Asimismo, la entrada en vigor de la ley de garantía de la libertad sexual en octubre de 2022 supuso una zozobra para la noche canalla catalana. Por lo pronto, los operadores han navegado la nueva norma -en Barcelona hay medio centenar de licencias municipales de local con reservado para la prestación sexual, un permiso anómalo-, pero se plantean cerrar si el Gobierno avanza en la senda abolicionista.