Este viernes ha tomado posesión como nuevo jefe de la Guardia Civil en Cataluña el general de brigada Pedro Antonio Pizarro de Medina. En un acto celebrado en la Comandancia del instituto armado en Sant Andreu de la Barca (Barcelona), Pizarro ha jurado su cargo “con lealtad al Rey, a la Constitución y a las normas del Estado”. Lo ha hecho en catalán en un patio de jura que había sido engalanado con banderas de España, pero también con la senyera. De hecho, el belalcazareño ha pronunciado la mayor parte de su discurso en la lengua catalana, aunque sin disimular su acento cordobés, lugar de origen de sus padres.
“Hace 40 años que soy guardia civil: mi primer destino fue Barcelona y también el último”, ha comenzado su discurso visiblemente emocionado. “Lo que pretendo que entiendan es que para mí es un orgullo que se me entregue el comandamiento de la zona de Cataluña, que representa la diversidad de la sociedad de la que formamos parte”.
Discurso conciliador
El nuevo jefe de la Guardia Civil en Barcelona ha resaltado que su bagaje, que lo ha llevado por varias ciudades españolas, lo ayudará a desempeñar las funciones propias de este cargo y destino, en el que se sienten incomprendidos por una parte de la sociedad.
Como muestra de su peregrinaje, ha destacado que tiene un hijo vasco, nacido en San Sebastián, un hijo catalán, nacido en Manresa, y una hija navarra, de Pamplona. Así, Pizarro ha defendido que se siente cordobés -lugar en el que nació-, pero también catalán, español y europeo.
Estrecha lazos con los Mossos, pero con límites
Si bien Pizarro también ha mostrado una actitud conciliadora con los Mossos d'Esquadra, cuerpo policial con el que ha mantenido productivas relaciones y que le ha otorgado incluso la medalla de bronce al mérito policial, ha aprovechado para defender las competencias de la Guardia Civil en Cataluña: "Lo hará en el ejercicio de sus competencias, con los mecanismos de coordinación y porque la seguridad pública es competencia del Estado”.
De hecho, el nuevo jefe de la Guardia Civil ha recordado que el instituto armado es quien tiene las competencias del control de los flujos migratorios, como policía de fronteras, lo que también incluye el control de las costas “que son objetivo de una vigilancia intensiva”. Así lo ha remarcado cuando quedan pocos meses para la celebración de la Copa América de vela en Barcelona, asunto que generó tensión entre el instituto armado y la policía autonómica por la voluntad de esta última de asumir la seguridad mediante su unidad de policía marítima.
Recuerda que controlan los puertos
También ha reivindicado su papel en la lucha contra el terrorismo, tanto nacional como internacional, mediante su pertenencia al Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO). “En un mundo globalizado no existen fronteras”, ha afirmado.
Tampoco en la red, por eso Pizarro ha recordado que la Guardia Civil se encarga de luchar contra los ciberdelitos. También de blindar las infraestructuras críticas. En Cataluña, ha remarcado, se encarga de dar seguridad a cuatro aeropuertos, a los puertos -dos de ellos de interés general- y a sus centrales nucleares. Así, Pizarro volvía a hacer hincapié en sus competencias en el mar.
También a perseguir la trata de seres humanos y a proteger el medioambiente mediante el Seprona. Por último, ha subrayado que el instituto armado es el único con competencia exclusiva sobre el control de armas y explosivos.
Marlaska le encomienda estrechar relaciones
El ministro del Interior, Fernando Grande- Marlaska, le ha encomendado “velar por el mantenimiento de las buenas relaciones con el resto de cuerpos policiales presentes en Cataluña”: los Mossos d’Esquadra, la Policía Nacional y las policías locales.
El ministro ha resaltado que los tres principales cuerpos policiales han sido capaces de tejer un sistema de cooperación y coordinación para garantizar la seguridad y protección de los ciudadanos de Cataluña. “Esta colaboración rinde cuantiosos beneficios a la sociedad catalana y que estés hoy aquí confirma esos lazos por encima de cualquier otra ventaja particular o corporativa”, ha reseñado. De hecho, durante la toma posesión de Pizarro han querido acompañarlo el comisario jefe de Mossos d’Esquadra, Eduard Sallent, y el recién nombrado jefe de la Policía Nacional en Cataluña, Manuel Rodríguez.
Intachable carrera
El nombramiento de Pizarro se produce tan sólo dos años después de su nombramiento como jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Barcelona. Este ascenso ha estado motivado por una intachable carrera en el instituto armado, en el que acumula numerosas condecoraciones civiles y militares, incluida una entregada por la Generalitat de Cataluña.
Al acto han acudido numerosas personalidades políticas, entre ellas el teniente de alcalde de Prevención y Seguridad en el Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, el presidente de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa; el diputado por Vox Ignacio Garriga; y el primer secretario del PSC y jefe de la oposición, Salvador Illa. También han acudido otras autoridades como el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Jesús Maria Barrientos, y el fiscal superior de Cataluña, Francisco Bañeres.