El tiempo no invita a ser optimista a corto plazo en materia de sequía. Lo indica la predicción del viernes 1 de febrero --cuando entra en vigor la declaración de emergencia por falta de agua-- y de los próximos días en la comunidad, que vive un anticiclón que "se mantiene firme".
El Servicio Meteorológico de Cataluña (Meteocat) así lo asegura, sin previsión de que caigan precipitaciones importantes.
Sol y calor
Las máximas de este viernes se esperan de hasta 20 grados, que se registrarán en las comarcas de la Costa Brava y el interior de Girona; el resto de la costa y la Depresión central también vivirán temperaturas propias de la primavera.
El cielo permanecerá sereno o poco nublado, ya que algunas nubes altas y finas atravesarán la comunidad, con más fuerza al norte de los Pirineos y nieblas en las comarcas leridanas de Ponent, donde las temperaturas no superaran los 10 grados.
Fuerte viento en la Costa Brava
Soplará tramontana en el Empordà con la suficiente fuerza como para agitar el mar, después de que se haya activado el aviso amarillo por fenómenos costeros estado durante la jornada anterior y hasta las 10 h del viernes.
Restricciones por sequía
El Govern pone límites al consumo de agua y prohíbe actividades como limpiar calles y lavar coches, salvo en comercios dedicados a ello. Las restricciones, tales como un consumo máximo de 200 litros por persona y día, afectan a 6 millones de habitantes, que deberán adaptar su día a día a otras limitaciones.
¿Sin lluvias hasta...?
El anticiclón "se mantendrá firme y no nos lo quitaremos de encima durante muchos días más", asegura el Meteocat.
De hecho, el próximo episodio de lluvias se espera para el fin de semana del 10 de febrero, cuando entre un frente atlántico que, muy probablemente, llegue desgastado a Cataluña, por lo que las precipitaciones serán débiles; dicho de otra manera, tampoco servirán para que remonten los embalses, a un precario 16%.