El Departamento de Salud ha nombrado a Joan Brunet i Vidal nuevo director general del Instituto Catalán de Oncología (ICO). Vinculado a la institución desde 2007, será el encargado de sustituir a Ramon Salazar, que presentó su dimisión después de que el Departamento de Salud le abriera un expediente por los pagos recibidos de farmacéuticas que no declaró en el Portal de Transparencia de la Generalitat.
La entidad ha optado por renovar su imagen con una persona de confianza. Brunet ha sido durante años jefe del Servicio de Oncología Médica del ICO Girona, además de fundador de la Sección de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) de cáncer hereditario y coordinador de ésta. Ha publicado más de 200 artículos en este ámbito y lidera proyectos de investigación nacionales e internacionales.
Actualizar el código ético
El presidente del ICO, Xavier Pérez y Berruezo, ha valorado el nombramiento de Joan Brunet como un “profesional conocedor profundo de la institución, firme defensor del modelo ICO, que ha trabajado y seguirá trabajando para reforzar el trabajo en red en los territorios, línea de trabajo que tendrá continuidad bajo su liderazgo”.
También ha destacado que uno de los primeros encargos del nuevo gerente será actualizar el código ético de la entidad. En este sentido, ha señalado que la experiencia de Brunet en el campo de la ética asistencial y la ética biomédica contribuirá muy positivamente a un nuevo impulso de la institución en el ámbito de la transparencia institucional.
Más de 14.000 euros sin declarar
El anuncio llega poco después de que Ramon Salazar presentara su dimisión por un presunto caso de corrupción. El oncólogo habría cobrado al menos 14.036,09 euros que no declaró de hasta siete laboratorios diferentes en 2022, año en que asumió el cargo de director general del ICO. Al ostentar un alto cargo en la Administración catalana, estaba obligado a declarar este tipo de pagos en el Portal de la Transparencia.
El médico colaboraba y recibía ingresos de farmacéuticas antes de ser director general de la institución, algo permitido, pero estas colaboraciones y pagos prosiguieron, sin ser declarados, cuando asumió la dirección del instituto. El exdirectivo también habría sido expedientado por la actividad privada de Sace Medhealth S.L, una empresa familiar fundada por él y a nombre de su mujer. La compañía es la propietaria legal de la plataforma Tertúlies Oncològiques, unas jornadas anuales sobre cáncer que se organizaban desde hace años bajo el sello de organismos sanitarios públicos.