Los Mossos d’Esquadra quieren incorporar herramientas como Pegasus o Candiru para investigar casos de terrorismo y crimen organizado. Así lo han expresado este viernes en la comisión de investigación del Parlament de Cataluña sobre el supuesto espionaje a líderes independentistas catalanes.
El comisario jefe el cuerpo, Eduard Sallent, ha confirmado que, a día de hoy, la policía catalana no dispone de este tipo de programas ni de sistemas parecidos. Además, ha remarcado que para cualquier intervención telefónica siempre necesitan una orden judicial y que su uso sólo se plantearía con la condición de que se efectuaran auditorías periódicas que permitiesen una trazabilidad para garantizar el buen uso de esta herramienta.
Ni espionaje ni investigaciones prospectivas
Sallent ha asegurado que ignora si otros cuerpos policiales disponen de este tipo de programas, “pero si Mossos tuviese que incorporar una herramienta de esta naturaleza, solo lo haría bajo estos principios" de trazabilidad, de auditoría y de tutela judicial, ha insistido.
Josep Maria Estela, quien fue el comisario jefe de Mossos d’Esquadra, ha suscrito las palabras de su sucesor y ha alegado que siempre que se investiga o se intervienen teléfonos se hace bajo tutela judicial. De lo contrario, las consecuencias penales para el funcionario que infringiese la ley serían muy graves.
De hecho, ha expresado que “muchas veces” los jueces han denegado las peticiones y los investigadores se han quedado sin intervenir. Además, si durante las escuchas policiales encuentran otro delito, paran las conversaciones, piden un nuevo permiso al juez y finalmente destruyen "las pruebas y las conversaciones".
El coste estaría justificado
El comisario jefe de la División de Investigación Criminal (DIC), Ramón Chacón, ha expresado que cualquier policía querría una herramienta como Pegasus para poder investigar, pese a que el coste de las licencias, que oscilan entre los tres y cuatro millones de euros, es muy elevado. Aun así, el beneficio estaría, en palabras de Chacón, “muy justificado”.
Así, la cúpula de Mossos d’Esquadra ha incidido en que la policía autonómica ni realiza espionaje ni investigaciones prospectivas, como señaló la expresidenta del Parlament Laura Borràs, condenada a cuatro años de cárcel corrupción.
Sobre el presunto espionaje a líderes independentistas la cúpula del cuerpo ha confirmado que ninguno ha interpuesto una denuncia ante la policía catalana, si bien cinco de ellos lo han hecho en los juzgados. De hecho, en cuatro de estos casos se ha solicitado la práctica de diligencias.