El mundo mira con preocupación la enésima guerra entre Israel y Palestina después de que, el sábado pasado, Hamás lanzara una ofensiva sorpresiva y sin precedentes desde la Franja de Gaza que se ha saldado ya con 800 muertos israelíes y 500 palestinos. Los efectos de este conflicto se han hecho notar también en Barcelona, donde los Mossos d’Esquadra han blindado las cinco sinagogas de la Ciudad Condal para evitar cualquier tipo de ataque a la comunidad judía. También vigilan el consulado y otros edificios de interés, aunque sin concretar cuáles por motivos de seguridad.
Uno de los lugares que protege la policía catalana es el centro Jabad de Barcelona, abierto desde hace más de 20 años en el barrio de Les Corts, donde los agentes flanquean la puerta e identifican a todos aquellos que se acercan a hacer fotografías, incluidos los periodistas.
Allí, el rabino David Libersohn ha explicado a Crónica Global que, aunque es habitual que las fuerzas de seguridad controlen las inmediaciones de la sinagoga, cercana a la comisaría de los Mossos d’Esquadra del distrito, ahora su presencia es más visible. Desde que el sábado destinaran de forma permanente a agentes uniformados a hacer guardia en su puerta. “Confiamos plenamente en las fuerzas y cuerpos de seguridad, que consideran que hay una alerta, aunque no un mayor riesgo”, expresa el jefe espiritual de la Comunidad Judía de Barcelona Jabad Lubavitch.
“Es un momento de recogimiento”
En el interior de esta sinagoga se mantienen las actividades culturales, religiosas y educativas “dentro de lo que permiten los ánimos” de la comunidad, asegura el rabino, que agradece el apoyo recibido por los vecinos del barrio en las últimas horas. También en el centro están volcados en animar a los fieles e intentar que se sientan más tranquilos frente a las noticias que llegan desde Israel. “Es un momento de recogimiento para la comunidad”, expresa Libersohn visiblemente consternado.
“Repudiamos absolutamente los actos de terrorismo y deseamos que esto termine de la mejor manera posible, porque todavía hay 150 rehenes víctimas de una mano vil que se mueve según sus intereses”, expresa Libersohn en referencia a Hamás, aunque sin mencionar en ningún momento el nombre del movimiento islamista. Sobre si esperan que los Mossos d’Esquadra mantengan la protección de sus instalaciones, el rabino aclara que lo único que desean es “que todo termine rápido y la situación vuelva a la normalidad”, aunque reconoce que no tiene esa certeza.
Pintadas en apoyo a Palestina
Esta sinagoga, hoy blindada por los Mossos d’Esquadra, fue vandalizada en abril de este año. Así lo confirma el rabino, que asegura que “un individuo o un grupo realizó pintadas en el exterior que no tenían que ver con la realidad de Israel”. En aquella ocasión, el centro de culto amaneció con un grafiti frente a la puerta principal en el que se podía leer “Por qué matáis en Palestina”.
El ataque se registró tan solo unos días después de otro contra la Gran Sinagoga Maimónides de Barcelona, ubicada en el barrio de Sant Gervasi, coincidiendo con la celebración de un acto para conmemorar el 80 aniversario del levantamiento del gueto de Varsovia. En aquella ocasión hicieron una pintada en apoyo a la población palestina sobre la fachada, en la que se podía leer: “Palestina libre del río al mar. Solidaridad con el pueblo palestino”. Se trata de otro de los edificios que los Mossos d’Esquadra vigilan y, si bien aseguran que se trata de un servicio “habitual” desde que se decretó el nivel 4 de alerta antiterrorista, reconocen que “ahora es mucho más visible”, con presencia policial día y noche frente a la puerta.
Los Mossos también protegieron las mezquitas
Fuentes de Mossos d’Esquadra han precisado a este medio que en los últimos días no han detectado una mayor hostilidad hacia la comunidad judía en Barcelona, pero que por precaución se ha decidido intensificar la protección en los centros de culto y otros edificios de interés.
Las mismas voces precisan que ya lo han hecho en el pasado con otras comunidades, pues desde la policía catalana están “sensibilizados y preocupados por la realidad geopolítica”. En este sentido, tras los atentados del 11M en Madrid, perpetrados por Al Qaeda, los Mossos d’Esquadra protegieron durante días las mezquitas de Cataluña para evitar cualquier posible ataque a la comunidad.