Tormenta mayúscula en el Hospital Universitario de Bellvitge (HUB) por el nombramiento de una convergente pata negra como número dos. Sílvia Cordomí, ex alto cargo con CiU y excandidata por este partido, es la nueva subgerente territorial del centro sanitario más castigado por los recortes del expresident Artur Mas, que costaron un 20% del presupuesto en este complejo médico.
Lo explican fuentes del sector sanitario, que alertan de que Cordomí es la nueva escudera de la gerente, Cristina Capdevila, nombrada en junio en sustitución de la ex directora general, Montserrat Figuerola, que se jubiló. Tras ascender a número uno de la gerencia del ICS en el área metropolitana sur, Capdevila ha nombrado como subgerente a Cordomí, provocando un seísmo entre la plantilla.
Ex alto cargo de CiU...
No en vano, a pie de urgencias y de planta de hospitalización recuerdan que la directiva entró en la Consejería de Salud en enero de 2011, tras la victoria electoral de Artur Mas (CiU) el mes anterior. Cordomí ha escalado en el Departamento, pasando por la secretaría técnica (2011-2012), la gerencia de Atención Primaria (2012-2015) y la dirección de Estrategia y Calidad (2019-2023).
Durante tres años, la alto cargo pasó al sector privado, a la farmacéutica Merck: de 2015 a 2019.
...y candidata pese a los recortes
Así, la nueva dos de Bellvitge estuvo en la Consejería cuando el exconsejero Boi Ruiz y su equipo acometían los recortes más duros en el sistema sanitario público. Entre 2010 y 2013, por ejemplo, la ciudad sanitaria que da servicio a L'Hospitalet y al Baix Llobregat --y en algunas especialidades a todo el sur de Cataluña-- perdió el 13% del presupuesto, cerró seis quirófanos y una UCI y sanitarios, incluyendo a "médicos estructurales". Hubo episodios inéditos en la sanidad catalana, como un motín de pacientes en verano de 2014 contra el cierre de varias unidades.
Esas medidas, que Salud justificó por las estrecheces presupuestarias, costaron un aumento de las listas de espera quirúrgicas. Tras esa fase tormentosa, con decenas de protestas de sanitarios y usuarios, Sílvia Cordomí se presentó en 2015 como candidata suplente de CiU en las elecciones municipales en Manlleu (Barcelona), su municipio de origen. Sin posibilidad de salir elegida edil, fue un aval político a la candidatura convergente.
Bellvitge cae de la lista de mejores
Antes de ese aval político y tuviera que ver con los recortes o no, el Hospital de Bellvitge, uno de los de referencia en Cataluña, cayó de la clasificación de 20 mejores elaborada por Iasist. Pasó en 2014, cuando no logró ningún premio, por numerosas distinciones en anteriores ejercicios.
Un año antes, en 2013, el Síndic de Greuges alertó de que la ciudad sanitaria superaba el límite de tiempo legal para operar en diez procedimientos quirúrgicos con plazo garantizado. Era el peor hospital de Cataluña junto a Viladecans, que se adscribe a la misma gerencia del ICS: la metropolitana sur.
Alfredo García, al CatSalut
Sea como fuere, Cordomí presenta unas credenciales rocosas para ser número dos de uno de los grandes hospitales públicos catalanes. Es licenciada en ADE por la Universidad de Vic; posgrado en Economía de la Salud por la UPF; especialista en e-Health por La Salle; Máster en Health Economics por la UPF y pasó por el programa de colaboración público-privada de Esade.
Lo que se afea es su participación en la Administración autonómica de los recortes sanitarios en Cataluña. Su trayectoria es, de hecho, la contraria a la de Alfredo García, exgerente de Bellvitge en la misma época (2012-2015), a quien ERC cesó en 2015 al llegar a la Consejería. Ha recalado en el CatSalut como subdirector.