Un comercio histórico de 1906 reabre como prostíbulo encubierto en Barcelona
New-phono, que abrió en el siglo XIX para vender gramófonos y cerró en 2018, sube la persiana como "masajes con final feliz" en la Ciudad Condal
16 agosto, 2023 20:01Un prostíbulo encubierto. Este es el nuevo uso que tiene uno de los comercios más antiguos de Cataluña, la tienda de instrumentos musicales New-Phono, que abrió en 1906, cerró en 2018 y ha subido la persiana como un local oriental de masajes que terminan en el llamado final feliz o una masturbación de caballeros encubierta.
Lo han denunciado vecinos del bloque del número 35 de la calle Ample de Barcelona --los pisos superiores tienen un propietario y tres locales que ocupaba New-Phono, otro--, que han alertado del "ir y venir de personas" que acuden al establecimiento. Son, sobre todo, "turistas". El negocio abrió recientemente con el cartel de Food Massage, una mala traducción en inglés de masaje de pies, pero ha quitado uno de los carteles y ha dejado solo el rótulo luminoso de Massage y las imágenes de cuerpos recibiendo un tratamiento.
"Tú ven y verás"
Pero, en el 35 de la calle Ample de Barcelona se practica la prostitución? Este medio ha acudido al local como un cliente camuflado. La botiguera, una comerciante oriental, ofrece "un masaje por todo el cuerpo". Cuando se le pregunta si ese tratamiento acabará con un "final feliz", la masajista esboza una sonrisa y apremia. "Tú ven luego y verás".
El precio del cuidado es de 100 euros, --"completo"-- por una hora en las manos de la masseuse que, según la madame, "se puede elegir entre varias chicas". Se trata de un precio más bajo que la prostitución convencional, que suele rondar los 150 euros por hora, según las páginas web especializadas en locales de compañía.
Junto al museo del cannabis
La tarifa es más reducida porque el prostíbulo encubierto también tiene una infraestructura más sencilla. Ocupa solo uno de los tres locales en los que se expandía la icónica tienda de instrumentos New-Phono.
Los otros dos también han cambiado de uso. De instrumentos musicales de época han mutado a bisutería, uno, y baratijas, el segundo. Se trata de cuatro locales que, "aportan poco al tejido comercial y han sacrificado los muebles históricos", lamenta Alberto Mejías, el que fuera fundador de Emblemàtics Barcelona, un activista que pelea por la supervivencia de los negocios históricos en la Ciudad Condal.
"Lo desconocíamos"
Además, esa aportación comercial discreta se suma a que linda puerta con puerta con el Museo del Cáñamo de Barcelona, una galería dedicada a la planta cannabicea que se expande por el Palau Mornau, un palacete modernista de 1902.
Preguntado por la cuestión, el dueño de los tres locales ha indicado a este medio que "desconocía" que uno de sus inquilinos permitiera la prestación sexual encubierta.
Un local de 1906
Durante años, la zona presumió de la actividad de New-Phono, un comercio que regentaba la familia Massó. Abrió en 1906, y la actividad comercial empezó en el punto de venta bajo la marca The New Phono LTD para comercial gramófonos, violines, pianos y discos, entre otros accesorios.
El establecimiento alcanzó su cénit en los años 20 del siglo pasado, cuando creó su propia marca de transistores de radio, New-Phono, que fabricaba en el piso superior del inmueble. Almacén y tienda cerraron en 2018 ante una caída de la demanda y el impacto del comercio electrónico.
Pérdida de comercios históricos
En cualquier caso, New-Phono desapareció. Y Barcelona perdió otro comercio histórico, antes de que anunciaran su desaparición la lamparería Viuda de Domingo Gou (1920); la mercería Casa Gallofré, con 109 años de historia; la papelería centenaria Hijos de J.Batlle Horta; el Bar Brusi o el Grabador Inglés, abierto en 1932 y que cambia de local por el alza del precio del alquiler.
También se han perdido La Casa de les Sabatilles, con 70 años de historia y protegida, que ahora se ha transformado en una franquicia de gafas de la Nasa; o el Pollo Rico, con un currículum con 54 años de historia. Sí ha reabierto la icónica Herboristeria del Rei, fundado en 1881 junto a la Plaza Real, y que un grupo de cacos había intentado robar.