El impactante caso del ciudadano albanés, Saimir Sula, fallecido en el Hospital del Mar (Barcelona), el 9 de mayo de 2020 y repatriado sin corazón, podría haber llegado a su fin. Después de tres años de litigios entre Barcelona y Tirana (Albania), el órgano del difunto ha llegado a su país de origen.
Según la familia de Sula, la entrega del ógano debía realizarse en la Ciudad Condal el pasado 12 de julio, en presencia de la hermana del fallecido, Majlinda Sula, del Defensor del paciente, y de los representantes legales de la familia, que estaban autorizados por la la Fiscalía de Tirana. Sin embargo, un nuevo contratiempo impidió que presenciaran el momento de la entrega del corazón a una comisión de expertos del país de los Balcanes.
Un nuevo contratiempo
A pesar de que las autoridades albanesas les habían invitado y autorizado por escrito a a estar presentes, no fue posible. "Fue una guerra increíble, porque dejaron a la familia y a los abogados en la puerta esperando, e incluso tuvieron que llamar a la embajada".
Según los allegados de Saimir Sula, se quedaron en la puerta. "Nos tuvieron seis horas", explican a Crónica Global.
Años de lucha
La familia lleva luchando por esclarecer la muerte de Samir, desde que su cuerpo llegase a Albania sin el corazón, un hecho que ha supuesto un choque diplomático entre España y el país del fallecido.
Los medios de comunicación albaneses recogieron con gran expectación el caso de Samir, y las autoridades del país balcánico han exigido explicaciones a España, por el que, sospechan, podría ser un caso de "tráfico de órganos". En primer lugar, por la forma en que se produjo la entrega del cuerpo. Después, por la negativa de la Audiencia de Barcelona a hacer la prueba de ADN al corazón, para corroborar que pertenece al joven difunto. Los familiares del fallecido se han manifestado, sin descanso, para que España y Bruselas se involucren en esclarecer la sospechosa desaparición.
Pendientes del ADN
Durante meses se reclamó una investigación que esclareciese qué había pasado para que el cuerpo de Saimir llegase a Albania sin el corazón. Tras varios meses y manifestaciones se remitió la autopsia del órgano. Sin embargo, según el Defensor del Paciente, el análisis del corazón se inició el 22 de abril. Es decir, 17 días antes del fallecimiento.
Ahora, será el país balcánico el que practique las pruebas de ADN para determinar que el corazón pertenece a Sula, ya que el gobierno albanés denunció por la vía penal el posible caso de tráfico de órganos.