El ‘indepe’ que dejó ciego de un ojo a un exlegionario por un puñetazo, absuelto

El manifestante independentista que durante la Diada de 2020 en Vilanova i la Geltrú dejó ciego de un ojo a un exlegionario, ha sido absuelto por el tribunal de la Sección 6 de la Audiencia Provincial de Barcelona. Los magistrados han concluido que el acusado actuó en defensa propia tras recibir amenazas de muerte y tras ser atacado por la espalda.

Por el contrario, condenan al exlegionario a dos años y dos meses de prisión como autor de un delito de amenazas con agravante de discriminación y por un delito leve de maltrato. 

"Quítate la bandera, te voy a matar"

Los hechos se remontan al 11 de septiembre de 2020, durante la celebración de la Diada en Vilanova i la Geltrú, cuando el manifestante independentista regresaba a su casa con una estelada anudada en el cuello. Fue el legionario quien le increpó al grito de: “El de la banderita, ven aquí, quítate esa bandera, que te voy a matar”. 

El independentista, que iba acompañado de su pareja, continuó su camino sin hacer caso a las provocaciones, pero el exlegionario le propinó un golpe por la espalda para intentar arrebatarle la bandera. Como reacción al ataque y “con ánimo de defenderse”, recoge la sentencia, el manifestante le pegó un puñetazo en la cara, rompiéndole las gafas e hiriéndolo en el ojo izquierdo. A raíz de este golpe el exlegionario sufre “un menoscabo muy sustancial de la capacidad visual”.

El 'indepe', exento de culpa

Sin embargo, el tribunal considera que fue el exmilitar quien cometió un delito de amenazas y otro delito leve de maltrato por golpear al independentista por la espalda. Por estos hechos lo ha condenado a dos años y dos meses de cárcel. También tendrá que indemnizar al manifestante con 1.000 euros y abonar una multa de 360 euros. 

El independentista, para quien la fiscalía pedía cuatro años de cárcel por un delito de lesiones con pérdida de órgano, ha salido airoso del juicio. El tribunal ha acordado absolverlo al entender que el puñetazo fue en legítima defensa y que, por lo tanto, está exento de culpa. Considera que el golpe fue "un acto instintivo" y que "no fue desproporcionado", pues respondió a un ataque gratuito por la espalda. 

Además, añade el tribunal, no usó ningún instrumento peligroso para atacar al exmilitar, no había tampoco una gran desproporción de constitución física entre ambos y que no hubo, posteriormente al golpe, un exceso gratuito de fuerza. Así, la sentencia absuelve al manifestante independentista del delito de lesiones con pérdida de órgano y no le impone ninguna indemnización.