La familia de Helena Jubany, la periodista asesinada en diciembre de 2001 en Sabadell (Barcelona), ha solicitado un análisis exhaustivo de todas las posibilidades combinatorias de ADN así como un nuevo atestado policial global para poder resolver el caso. “Tenemos derecho a saber quién asesinó a Helena Jubany y consideramos que hace falta poner todos los medios para llegar a la verdad”, ha reivindicado su hermano Joan en un comunicado remitido a los medios de comunicación este jueves.
El abogado de la familia, Benet Salellas, ha propuesto al juez instructor del caso que, antes de que archive la causa, se exploren todas las posibilidades que ofrecen las nuevas técnicas de análisis de ADN, que han avanzado mucho en los últimos 20 años. Además, pide que una unidad especializada de la policía haga un atestado recopilatorio del caso, dado que se trata de “una investigación compleja, muy larga en el tiempo y con multitud de investigados”.
Tres perfiles genéticos
La familia recuerda que en la ropa de Helena Jubany se encontró una mezcla de ADN que se corresponde con el de la propia víctima y “como mínimo” con el de otra persona más. Pero, hasta ahora, insisten, solo se han hecho pruebas como si la mezcla estuviese formada únicamente por el ADN de la fallecida y de una segunda persona, descartando que haya otros perfiles genéticos adicionales. Por eso, dicen, los resultados no han sido positivos.
“Comparando la mezcla con el perfil genético de un solo sospechoso el resultado es negativo porque en la misma hay indicadores que coinciden con un investigado, con el de Helena, pero hay otros que no coinciden con ninguno de estos dos”, expresan. Por eso, ahora piden al juez que se hagan nuevas comparativas considerando que la mezcla pueda contener perfiles de tres donantes y que se realicen todas las combinaciones posibles mezclando muestras de Helena Jubany, Montserrat Careta --fallecida en prisión--, Xavi J., Santiago L. y Ana E., es decir, de todos aquellos que han estado imputados en este caso.
Nuevas pruebas de ADN
Además de estos restos biológicos hallados en un jersey, la policía también halló ADN “no concluyente” en otras piezas de ropa que Helena Jubany llevaba el día de su muerte, concretamente en un cordón, en las zapatillas, en la chaqueta, en los pantalones, en un jersey y en los calcetines. Sin embargo, la familia denuncia que este ADN nunca se ha investigado, y piden ahora que se explore para saber a quién pertenece.
Sobre los vestigios de ADN de la fallecida, conservados en el Instituto Nacional de Toxicología, la familia solicita que se aclaren las contradicciones referentes al ADN hallado en las uñas de Helena Jubany, del que en un primer momento se dijo que pertenecía a una mujer desconocida y después a la propia víctima “pero sin aportar resultados de indicadores genéticos que aclarasen esta confusión”.
Solicitan que Mossos asuma el atestado
Además, la familia se queja de que el Instituto Nacional de Toxicología solo ofreció sus conclusiones en los informes emitidos, pero no los resultados, a diferencia de la Policía Científica que sí los incluyó. Por eso, piden que aporten todos los datos de los que dispongan de los análisis efectuados.
Antes de concluir la investigación, solicitan que una unidad especializada de la policía judicial elabore un atestado que incorpore técnicas de inteligencia policial y de análisis y toda aquella información que se haya ido recopilando a lo largo de estos 20 años para ordenar todo el material incriminatorio existente. Reivindican que sea la Unidad Central de Homicidios de Mossos d’Esquadra quien asuma esta tarea, pues “es una unidad de referencia y se encuentra en plena capacidad y disposición de hacerlo en solitario o en compañía de la Policía Nacional, que no dispone de una unidad equivalente en Cataluña”.