Nuevo desalojo en Rocafonda, conocido como el Raval de Mataró por haberse convertido en uno de los barrios más peligrosos de la localidad del Maresme (Barcelona). La policía ha echado este martes por la mañana a los okupas que vivían en un local abandonado de la zona y que presentaban un perfil conflictivo.
Tres de los desalojados han sido detenidos en una operación conjunta entre los Mossos d'Esquadra, la Policía Local y la Policía Nacional, según ha avanzado la publicación Capgròs y han confirmado fuentes policiales a Crónica Global. El local está situado entre las calles Gibraltar y Poeta Punsola, en los bajos del bloque histórico de la Cooperativa de Viviendas.
Insalubridad y conflictos
El inmueble llevaba cerca de cinco meses okupado y los intrusos habían protagonizado escenas de conflictos, inseguridad y problemas de convivencia con los vecinos. El desalojo se ha llevado a cabo después de que el ayuntamiento detectara condiciones de insalubridad y activase el protocolo de desahucio, y se ha saldado con dos arrrestados por incumplir la ley de extranjería y otro sobre la que pesaba una orden de detención anterior emitida por un juzgado de Barcelona y al que han custodiado los Mossos.
El barrio de Rocafonda de Mataró es uno de los más afectados por los okupas, que han tomado varios de los locales abandonados tras la desaparición de muchas sucursales bancarias. Los vecinos de esta zona degradada presencian reiterados robos, trapicheos y peleas.