El Canal Segarra-Garrigues ha cerrado el suministro de agua hasta el martes. La Comunidad General de Regantes ha tomado la drástica decisión hoy sábado por la situación de sequía en la que se encuentra toda España. 

Según ha informado el organismo, los hidrantes se abrirán solo a petición de los regantes a partir del próximo martes. En paralelo a ello, se informará a cada beneficiario del volumen máximo de agua mensual que se le puede adjudicar dada la situación actual de estrés hídrico. 

Los árboles, prioridad

Según la Comunidad, el objetivo de esta decisión es la supervivencia de los árboles. Se trabaja con la tesis de que no habrá más aportaciones del pantano de Rialb, por lo que se busca que subsistan los ejemplares de "la manera menos dramática posible". 

Por el momento, las reservas de agua en el sistema Oliana-Rialb son mínimas. Si no llueve, no está garantizado el suministro para ningún otro uso. En juego está el abastecimiento a municipios, la propia flora y las granjas. 

La campaña "no está garantizada"

Lo que es más, la situación de falta de lluvia es tan agravada que la campaña de regadío "no está garantizada" en ningún sector en estos momentos. Es así porque aunque el Canal Segarra-Garrigues tiene las balsas llenas de los sectores 1 al 9.2-15, carece de suministro para abastecer a los demandantes. 

Ante ello, se están implantando otras medidas. Además del corte general de agua --excepto la que llega a las granjas-- no se abastecerá a los nuevos sembrados o plantados a partir del 28 de abril. 

Por orden de prioridad

La sequía también provocará que los técnicos autoricen el uso de agua solo en algunos cultivos que demandan más líquido elemento, como los leñosos. El orden de prioridad para acceder al riego lo establecerá el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA), que depende de la Generalitat de Cataluña. 

Es así pese a que la reducción de agua puede ser "extrema" para algunos árboles, insisten. Pero el acceso al bien común dependerá del estado de las balsas.

Como en 2022

Por lo pronto, desde la Comunidad alertan de que entre mayo y agosto de 2023 solo se asignará el mismo volumen de agua que en 2022. No habrá excepciones. 

Si llueve y hay más aportaciones, el Canal dedicará las entradas a alimentar los pisos más afectados, que presentan reducciones de hasta el 70%.