Un mundo sin Hora del Planeta gracias a las renovables

El pasado sábado 25 de marzo, como todos los años desde 2007, se celebró la Hora del Planeta, el movimiento mundial en el que participan más de 190 países y millones de personas apagando las luces de hogares, edificios, empresas y más de 17 mil monumentos emblemáticos, incluyendo La Sagrada Familia, la Torre Eiffel y el Big Ben. Aunque el impacto de una hora sin uso de electricidad es significativo, esta se ve limitada a ser una iniciativa simbólica con el fin de concienciar a la población y sus efectos no son a largo plazo.

El sector eléctrico y sus emisiones

El sector de la energía es el mayor contribuidor de las emisiones de CO2 en el mundo. En 2021, los consumos eléctricos representaron un 84% del total nacional de 288,6 millones de toneladas, número que ha aumentado a 305 millones de toneladas para 2022. Considerando estas cifras, los beneficios de una hora de apagón son pocos frente al daño diario causado por el consumo de electricidad.

Según explica Wouter Draijer, CEO de Solarmente “Las grandes empresas de distribución de energía eléctrica continúan bloqueando la transición hacia las energías renovables, pero ninguna entidad responsable está haciendo algo al respecto. Por ejemplo, en países como Holanda, Alemania y Bélgica la medición neta impulsó la adopción de la energía solar residencial. La medición neta (net-metering) permite a los propietarios de viviendas devolver electricidad a la red y recuperar esa energía para consumirla en cualquier momento durante ese año (ratio 1:1)”.

Renovables contra el cambio climático

Según el más reciente informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU, concluyó que el calentamiento global ha causado daños irreversibles y que los impactos, peores de lo que se esperaba, están agravándose cada vez más. 

Los principales culpables son los combustibles fósiles –carbón, petróleo y gas– y la explotación indiscriminada de recursos naturales. Por esta razón, es que las energías renovables tienen un papel fundamental para el objetivo de reducir las emisiones y así evitar sobrepasar el límite de calentamiento medio planetario de 1,5ºC.

La aportación de Solarmente

Solarmente, startup que ha tenido un crecimiento exponencial desde su creación hace dos años, logró ahorrar 500 toneladas de CO2 mediante la instalación de 2.500 paneles solares de 430W, lo cual equivale a 700 árboles plantados, cifra que se espera aumente significativamente para este año. En promedio, cada casa con una instalación puede llegar a ahorrar 23,4 toneladas de CO2 anualmente

“Un millón de propietarios de casas en España cambiarán a la energía solar en los próximos 24 meses. Este es el mínimo indispensable para alcanzar los objetivos de sostenibilidad”, afirma Draijer, cofundador de la empresa. La energía solar es no solo una de las más eficientes y limpias, sino también una de las más accesibles con nuevos modelos como el de suscripción ofrecido por la marca, que consta de un pago fijo mensual, evitando así las grandes inversiones iniciales.

Al día de hoy, la humanidad necesitaría en promedio 1,75 planetas para satisfacer su demanda de recursos naturales. Según el informe del IPCC la “ventana de oportunidad” para asegurar un “futuro habitable y sostenible” se está cerrando rápidamente, por lo que la reacción de la población debe estar a la altura y aumentar su ritmo, tanto de parte de las políticas gubernamentales como de los hábitos de las personas. La Hora del Planeta es solo un primer paso hacia el cambio real y urgente que necesita la sociedad.

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