El conductor de TMB acusado de un delito de odio durante su declaración en la Audiencia de Barcelona / TSJC

El conductor de TMB acusado de un delito de odio durante su declaración en la Audiencia de Barcelona / TSJC

Vida

Seis meses de prisión para el conductor de TMB acusado de arrancarle el velo a una pasajera

El tribunal concluye que las declaraciones de las víctimas y los testigos son fiables y coinciden en que actuó "con agresividad inusitada"

23 marzo, 2023 12:55

La Audiencia Provincial de Barcelona ha condenado por un delito contra los derechos fundamentales a seis meses de cárcel y a otros seis de multa al conductor de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) acusado de increpar, insultar e intentar arrancar el velo a una pasajera musulmana que viajaba con sus tres hijos menores de edad. 

La sentencia considera probado que, después de que la pasajera no pudiese validar correctamente la tarjeta de una de sus hijas, él aprovechó para hacer alusiones a su origen, “ya que presentaba una indumentaria propia de la cultura magrebí, incluyendo un velo cubriendo el pelo” y que le profirió frases como “venís aquí a vivir del cuento”.

"Vete a tu país"

Tras varias paradas en las que el conductor continuó pronunciando comentarios racistas se dirigió a ella para decirle que debía abandonar el vehículo. Una vez la mujer se apeó del autobús con sus hijos se dispuso a hacer una fotografía de la matrícula, lo que desató la ira del acusado.

Según el auto al que ha tenido acceso a este medio el acusado descendió muy alterado, con gritos dirigidos a la víctima y profiriendo expresiones insultantes como “puta”, “zorra”, “putos moros” o “vete a tu país”. Además, intentó arrancarle el velo de la cabeza y hacerle fotos. La sentencia recoge que cuando sus hijos intentaron interponerse entre ellos para defender a su madre, el conductor los cogió de los brazo causándoles heridas superficiales. A una de ellas incluso le tiró del pelo.

Expresiones despectivas y racistas

El tribunal considera que las tres declaraciones, tanto de las víctimas como de los testigos, coinciden en el núcleo esencial y que “no hay causa para poner en duda la fiabilidad” de tales relatos, que refieren que el acusado actuó “con agresividad inusitada” y profiriendo expresiones “despectivas y racistas”.

Por todo ello la Audiencia de Barcelona le impone una pena de seis meses de cárcel y seis meses de multa a razón de una cuota de 10 euros diarios. También le impone la pena de inhabilitación para profesiones u oficios educativos durante un tiempo de tres años. Asimismo, deberá indemnizar por daños morales con una cantidad total 1.000 euros a la víctima y cada uno de sus tres hijos menores, a los que tendrá que entregar, además, otros 383 euros por las lesiones causadas.