El conductor de TMB acusado de un delito de odio durante su declaración en la Audiencia de Barcelona / TSJC

El conductor de TMB acusado de un delito de odio durante su declaración en la Audiencia de Barcelona / TSJC

Vida

El conductor de TMB acusado de arrancar el velo a una mujer asegura que lo amenazó de muerte

La víctima sostiene que el procesado estaba “fuera de sí”, que la miraba con “asco” y que le dio “miedo” por el tono y la violencia con la que se dirigió a ella y a sus hijos

7 febrero, 2023 12:39

Este martes se ha celebrado en la Audiencia Provincial de Barcelona el juicio contra un conductor de autobuses de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) acusado de un delito de odio por increpar, insultar e intentar arrancar el velo a una pasajera musulmana que viajaba con sus tres hijos menores de edad. Unos hechos que, según el conductor, nunca sucedieron. En contra de lo relatado por las víctimas y los testigos, el procesado ha declarado que fue la mujer quien lo amenazó de muerte “pasándose el dedo por el cuello”.

La víctima ha explicado que el 29 de mayo de 2020 se subió al autobús de la línea V19 con dirección a la Barceloneta para ir a la playa con sus tres hijos, menores de edad. Cuando subieron al autobús, en la calle Santuari, validó su tarjeta y la de sus hijas en la máquina, pero una de ellas, que estaba nueva, pitó indicando que estaba caducada. Tanto la afectada --que no habla correctamente español-- como su hija intentaron explicárselo al conductor, pero según la declaración de ambas en el juicio, este las ignoró y las miró “con asco”.

Comentarios racistas en alto

Tanto la madre como la hija han explicado en la vista celebrada este miércoles que, una vez tomaron asiento el conductor empezó a proferir una retahíla de comentarios racistas, audibles para todos los pasajeros del vehículo. “Hablaba solo. Empezó a decir: ‘Vienen a vivir del cuento, invita la casa’, y otra serie de comentarios racistas”, ha expresado la principal afectada. “Nos miraba a través del espejo y hacía comentarios dirigidos a nosotras”, ha añadido la hija. Después de un encontronazo con un motorista, la situación empeoró y, según ellas, el conductor pidió en alto que "quien no tuviera tarjeta se apeara del autobús".

Imagen de un autobús de TMB en Barcelona / Cedida

Imagen de un autobús de TMB en Barcelona / Cedida

Aunque ambas han expresado que tenían el título en regla decidieron bajarse. “Nos miraba con cara de odio, estaba muy nervioso y mi madre me dijo que no bajásemos, que no estaba bien”. Fue precisamente este comentario, en el que la víctima insinuó que estaba "loco", lo que encendió la ira del conductor que, tras arrancar y conducir durante apenas tres metros, echó el freno de nuevo y se apeó del autobús.

"Me daba miedo"

Intentó arrancarme el pañuelo mientras me grababa”, recuerda la víctima. “Me llamó puta y zorra. Me dijo: 'Llama a los Mossos para que te lleven a tu país'. Estaba fuera de sí. Me daba miedo”, ha expresado la mujer. La víctima ha expresado que el conductor intentó arrancarle el velo para hacerla “sentir mal”.

Mientras todo esto sucedía, tanto la hija como una testigo de los hechos han relatado que el conductor profirió improperios contra la viajera. “Ya no solo eran insultos racistas, también insultos dirigidos a mi madre como 'puta, zorra y guarra', con intención de arrancarle el velo”. Una versión que también sostiene una testigo de los hechos, que ha expresado que el conductor de TMB “estaba fuera de sí y lleno de odio”. “Fue una agresión física y verbal racista. Le decía: 'puta, vete a tu país, me cago en los putos moros'. También intentaba grabar a los menores. Fue xenófobo, racista y machista". El conductor también llegó a forcejear con los niños para apartarlos de su madre, agarrándolos del brazo y del pelo, lo que les produjo lesiones leves.

El conductor niega los hechos

Por su parte el conductor ha expresado que los hechos de los que se le acusan nunca sucedieron. Mantiene que uno de los títulos pitó indicando que estaba caducado y que instó a la mujer a comprar uno nuevo para sus hijas. "Lo único que hice fue informarla", ha declarado ante el tribunal. Según su versión fue la denunciante quien “se tomó mal” sus palabras y le dijo que “estaba loco si pensaba que iba a comprar una tarjeta nueva”. Asegura que a partir de ese momento él no abrió la boca y que tampoco les pidió que se apearan del autobús porque ella había pagado el billete y las menores no tenían ningún tipo de responsabilidad.

Mantiene que se bajaron por voluntad propia y que el motivo por el que se apeó del autobús tras reiniciar la marcha fue porque la mujer le hizo un gesto que interpretó como una amenaza de muerte, pasándose el dedo por la garganta. “No la toqué. Ya me agredieron en una ocasión, por lo que me bajé para hacerle una foto en defensa. Para tener una prueba de que me podía haber agredido”, unas amenazas que nunca denunció, según él, porque “no tenía pruebas”.

10 meses de cárcel

El conductor, que llevaba 15 años trabajando para TMB, ha reconocido que lo habían acusado anteriormente de racista, pero que nunca le habían puesto una queja formal por este motivo. “Es común en personas que no tienen una tarjeta válida, esto es habitual. El fraude no entiende ni de religión, ni de estatus social”, se ha defendido.

Por su parte, la fiscalía ha señalado que la versión de la víctima y de su hija es “sólida y contundente” y que, además, se ha podido corroborar mediante la declaración de la testigo de los hechos. Por este motivo, solicita para él 10 meses de prisión por los delitos de odio y discriminación, además de 5.000 euros de multa y una indemnización para los hijos de la víctima por las lesiones causadas. Entiende que los hechos constituyen un "ataque a la dignidad" por los comentarios de carácter ofensivo y por las lesiones causadas a los menores. "Las acciones fueron movidas por la animadversión hacia la cultura y el origen extranjero de las víctimas", ha concluido.