La parroquia de Santa Anna, de Barcelona, acogió la noche del pasado jueves a una mujer brasileña y a su hijo de corta edad que se encontraban durmiendo en la calle Piera. La iglesia atendió también a un jóven con cáncer que está en tratamiento de quimioterapia y a otro que recibe diálisis. El rector de la parroquia, Peio Sánchez, cree que esta clase de sucesos evidencian “la quiebra de los servicios sociales” en Cataluña, según ha declarado a EFE.
La noticia llega después de que se haya hecho pública la muerte de dos personas sin hogar en menos de 24 horas en la capital catalana. La primera de ellas falleció en la mañana del pasado jueves en la calle Cartagena, tal como adelantó Crónica Global, mientras que las autoridades encontraron a la otra hacia las nueve de la noche en la calle Àusias March. Con ellas, se eleva a cinco el número de personas sintecho que han perdido la vida en la ciudad en 2023.
Personas "en máxima vulnerabilidad"
Sánchez afirma que le preocupa que a la iglesia lleguen personas “en máxima vulnerabilidad” para las que no se encuentran soluciones. “Alarma especialmente el desamparo de mujeres”, expone el sacerdote, que ha recordado otro episodio en el que la parroquia de Santa Anna tuvo que atender a finales de diciembre a una mujer con dos hijos menores que vivían en la calle.
En referencia a Yassine, el chico que llegó el jueves a la iglesia del barrio Gótico y que padece cáncer, el capellán ha afirmado que “nadie ha sido capaz de buscarle un lugar para no tener que dormir en la calle” aún conociendo su situación. El Hospital de Campaña, la entidad que atiende a las personas que acuden al templo, ha denunciado que el joven espera desde hace tres meses a que le llamen para poder tener una plaza en un albergue.
Dos fallecidos en 24 horas
El desamparo de las personas que viven en la calle en Barcelona es un problema visible estos días a raíz de la muerte de Marc, una de ellas, a primera hora del pasado jueves en la calle Cartagena, a las puertas de un bajo del Centre Esportiu Sagrada Familia. Algunas personas que le ayudaban y los propietarios de varios establecimientos comerciales de la zona afirman que el hombre estaba enfermo, tal como explicó este medio.
Por su parte, los Mossos d’Esquadra investigan el fallecimiento de otra persona sintecho en la calle Àusias March, en el distrito del Eixample. Los agentes recibieron el aviso el mismo día alrededor de las nueve de la noche. Aunque su cuerpo, encontrado por un transeúnte en medio de la vía pública, no presentaba signos de violencia, la policía catalana está a la espera de que la autopsia determine las causas de la muerte.