Muere un hombre tras "horas" esperando en urgencias del Hospital de Martorell

Un paciente falleció ayer por la noche en el Hospital de Martorell (Barcelona) tras al menos "dos horas" esperando en el servicio de urgencias. El hombre, que había llegado en ambulancia y aguardaba en silla de ruedas, se quejó durante largo rato de que "le dolía el pecho", pero no se le prestó asistencia sanitaria porque el centro estaba "colapsado", según testigos presenciales. Finalmente perdió el conocimiento, se desplomó y falleció. 

Lo explican fuentes médicas, que alertan de que las urgencias donde ocurrieron los hechos "están siempre saturadas". Ayer, indican, no fue una excepción. "Había mucha presión asistencial", lamentan. El hombre llegó en un vehículo de transporte sanitario y pasó por triage. Se le examinó, pero quedó esperando en una silla de ruedas porque había demasiados pacientes por atender. "Al menos dos horas", señalan las mismas fuentes. Finalmente y tras quejarse durante "rato" de que le dolía el pecho, se desplomó y falleció. 

Este medio se ha puesto en contacto con la gerencia para recabar más datos. No ha recibido respuesta. 

Urgencias saturadas

A la espera de que trascienda más información, lo factual es que las urgencias del Hospital de Martorell es una de las áreas en las que rutinariamente la plantilla se queja de "colapso". En diversas ocasiones --como en 2016 y 2017, con el exconseller de Salud Toni Comín en el cargo--, la plantilla ha denunciado una congestión de pacientes muy elevada. 

Tras los hechos de ayer, fuentes médicas de la ciudad sanitaria han recordado que la unidad "es muy pequeña e insuficiente para la población que atiende". Por ello, "se llena de pacientes con mucha facilidad, y los nuevos que llegan, como el hombre de ayer, no son atendidos como deberían". 

Ampliación con retraso

Sea como fuere, el complejo médico tiene obras pendientes para abordar su falta de espacio y, también, de profesionales. En 2019 presentó un proyecto de ampliación para ganar un 63% de superficie para atender a pacientes, ampliando los boxes actuales en 49; y las habitaciones de hospitalización un 15% hasta las 149. 

La actuación tenía como objetivo mejorar la asistencia sanitaria a la población del Baix Llobregat norte, pero en 2020, año en el que la pandemia llegó a España, aún no habían comenzado, pese a que su duración se prevé de ocho años.