Un año del tiroteo de Cerdanyola: "Estamos en tratamiento psicológico"
Allegados y vecinos de Óscar, el mecánico abatido de nueve tiros hace 12 meses, viven atemorizados y desconfían del "lento" avance de la investigación
30 noviembre, 2022 00:00"Estamos en tratamiento psicológico". Esto es lo que explican allegados y vecinos de Óscar, el vecino de Cerdanyola del Vallès (Barcelona) que sufrió una emboscada y fue tiroteado en nueve ocasiones --le impactaron cuatro disparos-- hace hoy exactamente un año: el 30 de noviembre de 2021. El círculo del malogrado mecánico, que falleció en el acto, se muestra "atemorizado" y guarda algunos recelos con la investigación del asesinato premeditado, que conducen los Mossos d'Esquadra.
¿Qué sabe la policía catalana 365 días después de la ejecución a sangre fría? Una portavoz ha explicado a Crónica Global que las pesquisas para aclarar la trágica muerte del padre de un hijo "continúan". Lo que se conoce es que el área de Investigación Criminal de la región policial metropolitana norte (RPMN) tutela el caso, y que el cuerpo de seguridad sigue en contacto con la viuda y el vástago de la víctima.
Doce meses de amenazas
Pero el tiroteo sigue sin resolverse. Y lo que también es factual es que el acto criminal ha dejado su huella en una comunidad de vecinos y su entorno que trata de salir adelante a duras penas. Fuentes conocedoras de la situación lamentan que "muchos" de los que viven "cerca" están "en tratamiento psicológico por el shock de la muerte". Las mismas voces, que exigen hablar desde el anonimato por miedo, aseguran también que "los mossos patrullaron con más frecuencia por la zona durante dos meses, pero después la presencia policial se relajó".
Y los vecinos tienen motivos para la alarma. Como avanzó este medio, los asesinos, presuntos sicarios por lo concienzudo de la trampa, amenazaron a la familia del finado, primero. No contentos con ello, asaltaron el domicilio de la viuda de Óscar con su hijo dentro, explicó Crónica Global en exclusiva. Una vez dentro de la vivienda, ataron a la mujer y le exigieron una ubicación que ella no sabía. Finalmente, ante la falta de respuesta y el ruido de vecinos, se marcharon. Han sido, pues, 12 meses de amenazas, en lugar de un tiempo para hacer el duelo.
"Aquí se habla de todo"
Mientras la policía trabaja y el entorno de la víctima sufre el acoso de los criminales, hay sufrimiento. "Cada 30 de cada mes --hoy no será una excepción-- nos acordamos de él. Es que lo mataron casi en la puerta de su casa. Fue horrible y despiadado", se queja alguien cercano al círculo de Óscar. En el lugar en el que los pistoleros abatieron al padre de un hijo, una vela y fotos y carteles le recuerdan. No hay más signos de actividad.
¿Por qué alguien tendió una trampa y mató al hombre? "Aquí se habla de todo. De droga, de importación de furgonetas. Que han sido los rumanos o que algún clan familiar está vinculado. Pero lo que es seguro es que nadie sabe nada y que Óscar hablaba. mucho". ¿A qué se refieren? "Se montaba sus películas, de que haría esto, de que haría lo otro. Era un echao palante", agregan.
Importación de vehículos
Lo único cierto es que Óscar había trabajado para la vecina tienda de reparación de automóviles Neumáticos Poli. Desde hacía un tiempo desempeñaba por su cuenta. Su entorno admite que había entrado en el negocio de la importación automovilística de forma totalmente legal. Y pudo toparse con la gente equivocada.
Esa gente amedrenta tanto a los vecinos como a los negocios cercanos. Nadie en el entorno del lugar habla con los periodistas. Sí lo hacen fuentes conocedoras de la situación, que recuerdan que "nadie aquí se puede pagar seguridad privada, y menos los del bloque de Óscar, pues pagan un alquiler social". Eso sí, hay nuevos vecinos en la finca que han colocado alarmas. "Y todo el mundo está más atento por si pasara algo. La sensación es que estamos más alerta", explica una figura cercana al lugar.
Segundo aniversario negro
Son sensaciones tan tangibles como reales, como lo es el hecho de que la ejecución a sangre fía de Óscar hoy hace exactamente un año es el segundo aniversario negro en Cataluña en pocos días. El primero fueron los 12 meses sin respuestas de la emboscada que permitió acabar con la vida de Valentín Moreno en Sant Adrià de Besòs (Barcelona) el 19 de noviembre de 2021, como explicó Metrópoli. El llamado asesino de la Vila Olímpica fue abatido de un tiro en la cabeza por detrás. Como en el caso de Cerdanyola, los hechos siguen bajo investigación judicial, aunque sin detenciones ni respuestas.
Fueron dos asesinatos premeditados similares, y sobre ambos revoloteó el fantasma de la droga, algo que las investigaciones policiales deberán probar. Lo que sí se sabe es que si en el caso de Moreno se trataba de un músculo de alquiler, Óscar era un apacible padre de familia al que alguien decidió quitar la vida.
Una trampa de buena mañana
Fue el 30 de noviembre de 2021 por la mañana. El hombre acababa de llevar a su hijo al colegio y se había detenido a tomar café en La Cepa de Oro, un bar cercano. Al ir a coger su coche, alguien le había pinchado las cuatro ruedas. El vehículo estaba inservible. Con escasa solución de continuidad, se le acercaron y le descerrajaron nueve tiros, de los cuales le impactaron cuatro. Fueron disparos secos, de buena mañana, con la ciudad metropolitana despertándose. Al lugar acudieron raudos Mossos d'Esquadra y el Sistema de Emergencias Médicas (SEM), pero la víctima ya había fallecido.
Fue uno de los hechos criminales que marcaron el final de la fase dura de la pandemia, que ha provocado el repunte de determinados tipos de violencia, como el uso de armas blancas, por ejemplo. De hecho, el portal estadístico del Ministerio del Interior consigna un crecimiento de homicidios dolosos y asesinatos consumados del 12,5% en Cataluña de 2020 a 2021: hubo 48 el año pandémico, y 54 el ejercicio siguiente.