Los profesores trabajarán en julio para avanzar la vuelta al cole en septiembre

El Govern obligará a los profesores a trabajar los primeros días de julio. De esta forma, podrán preparar el curso escolar que empezará el 5 de septiembre (en infantil y primaria) y el 7 en secundaria y bachillerato. Así se lo ha trasladado el Departamento de Educación a los directores de los centros de Cataluña horas antes de reunirse con el comité de huelga para intentar desatascar el conflicto laboral en el que está sumido el sector. Una nueva “imposición” del conseller Josep Gonzàlez-Cambray que no ha gustado a los sindicatos. Toman como otro desplante que la consejería no haya esperado a sentarse con sus representantes en la mesa de negociación que tendrá lugar este martes a las cuatro de la tarde en la Consejería de Trabajo, tal como avanzó Crónica Global, para hacer el anuncio de la nueva modificación del calendario laboral de los docentes. 

Sentada reivindicativa en la manifestación en contra de Cambray / (CG)

La comunicación de la Generalitat a las direcciones evidencia, según su punto de vista, “el rechazo de aplazar la entrada en vigor del nuevo calendario escolar”. Cambray sigue enrocado en volver antes a los colegios porque lo considera una medida positiva para los alumnos y las familias, ya que “favorece la conciliación”. La falta de previsión y de diálogo llevaron a los profesores a convocar cinco días de huelga durante marzo.

La educación pública, la concertada, el sector de las extraescolares y el personal laboral se han unido en una convocatoria que aglutinó en Barcelona a más de 22.000 personas, según la Guardia Urbana, en los primeros días de protesta. A pesar de que los sindicatos estaban “dispuestos a hablar” en el encuentro de este martes, el nuevo cambio en el calendario laboral se toma como otra afrenta de la Generaltia. Por este motivo explican que se mantienen firmes frente a la convocatoria de un nuevo parón el 29 y 30 de marzo. “El Govern sigue imponiendo y menospreciando a todo el colectivo docente”, lamentan algunas fuentes en declaraciones a este medio. 

Manifestación Educación / LUIS MIGUEL AÑÓN (CG)

Los sindicatos mantienen la huelga

Los profesores destinaban los primeros días de julio a formarse, pero a partir del próximo curso deberán trabajar en horario intensivo para avanzar en la organización de la vuelta a las aulas. Por ello, las formaciones de ese mes pasan a ser por la tarde, con tal de que los docentes puedan asistir a sus puestos de trabajo en horario matinal. Algo que consideran “una gamberrada” que demuestra la “poca intención de negociar”. Y es que no ven normal que el titular de Educación comunique el cambio en las instrucciones del inicio de curso poco antes de sentarse con unos sindicatos que lo que le reprochan, precisamente, es la falta de comunicación.

También el pleno del Consell Escolar ha desautorizado a Cambray este lunes al aprobar --con 24 votos a favor, 18 en contra y tres abstenciones-- un dictamen que pide aplazar, al menos un curso, la aplicación del nuevo calendario y la jornada intensiva. Este documento sólo tiene valor consultivo, pero implica un gesto con el que este órgano quiere presionar y hacerle ver al conseller la unión de todo el sector escolar en contra de las formas que mantiene para organizar el sector. 

Miles de profesores claman otra vez en la calle por la dimisión de Cambray / EFE

Proceso de selección del personal interino

Por otro lado, la consejería también ha explicado a los centros algunos cambios relativos a la calendarización de los procesos selectivos del personal interino y las adjudicaciones de verano. Otro “despropósito”, ya que el personal interino y sustituto no tendrá el tiempo suficiente para elegir la escuela donde conseguir vacante. Si se modifica el calendario, se tiene que avanzar el nombramiento de profesorado interino --que antes se hacía a mediados de julio para comenzar en septiembre--, por lo que se harán los nombramientos en junio y sabrán dónde tendrán que ir 15 días antes. “Ante esto, ¿qué clase de negociación quieren hacer?”, critican.

El consejero de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray / EP

Los sindicatos, que ya tenían “pocas esperanzas” de que se llegase a algún acuerdo en la reunión de este martes, ahora lo ven más complicado, pues aseguran que Cambray y su equipo demuestran de nuevo que “pasan de la comunidad educativa”. Las fuentes consultadas por Crónica Global aseguran que seguirán luchando para que se escuchen sus demandas. Lo harán el próximo 29 y 30 de marzo en varias acciones que se llevarán a cabo en ciudades como Barcelona, donde se celebrará una “gran manifestación”.

Además, trabajan para implicar a las familias en esta “lucha, que es de todos”. Y es que no es solo el calendario lo que ha “indignado” al profesorado. También son los recortes de hace diez años y que todavía no se han revertido, la estabilidad del personal interino, las sobrerratios de alumnos en las aulas y que se destine un 6% del PIB a la educación. Demandas que, por el momento, no han recibido respuesta de un conseller de la Generalitat que sigue "ausente". El conflicto laboral en la educación se prevé largo.