La sexta ola de Covid se evidencia en las aulas de los colegios de Cataluña. A tres días de acabar el trimestre y de empezar las vacaciones de Navidad, son muchos los padres que, por “prudencia”, prefieren que los menores se queden en casa y no asistan a las clases. De esta forma, evitan “riesgos innecesarios” de cara a las reuniones familiares previstas para las próximas semanas.

Así lo explican desde varios colegios como el Fort Pienc, del Eixample de Barcelona. Según fuentes de la escuela, actualmente tienen a siete grupos confinados, de los cuales uno ha regresado este lunes tras hacer la cuarentena. Sin embargo, muchos menores no han acudido porque sus padres han querido “protegerlos de cara a las fiestas”. “Estas fechas condicionan a las familias”, aseguran.

No dan "el temario habitual"

Ante esta situación, que les parece “lógica” viendo el aumento de casos, los profesores “no están haciendo temario habitual". “Primero, porque ya estamos a finales del trimestre y, segundo, porque faltan muchos niños”, explican. En su caso, el número habitual de alumnos es de 25 por clase, mientras que ahora la media está en 17 y, en algunos casos, incluso menos.

A partir de aquí, se abre el debate de si debería retrasarse el regreso a las aulas tras las vacaciones, aunque el consejero de Salud, Josep Maria Argimon, lo descartó. Desde CCOO consideran que “se tiene que extremar la seguridad”, aunque son partidarios de que se vuelva a la presencialidad. Sin embargo, supeditan esta decisión a los datos que facilite la consejería durante las fiestas.

"La situación está peor que nunca"

Desde UGT, su representante en educación, Lorena Martínez, ve “respetable” que las familias decidan no llevar a sus hijos al colegio en los últimos días porque “no se quieran arriesgar a estar confinadas durante todo el periodo vacacional”. Aunque preferiría no tener que retrasar la vuelta al colegio, también reconoce que acatarán lo que diga Salud: “La situación está peor que nunca; todo sea por la no propagación de la pandemia”, dice Martínez.

 

Asimismo, lamenta que el nuevo protocolo Covid entre en vigor el día 23 y no este lunes como estaba previsto. “Parece que hayan esperado a que se acaben las clases para hacerlo efectivo”, denuncia. Por tanto, desde el jueves todos los contactos estrechos de un positivo tendrán que hacer una cuarentena de diez días, estén o no estén vacunados.

Educación y Salud no toman "las medidas necesarias"

Desde la Unión Sindical de los Trabajadores de la Enseñanza de Cataluña (Ustec), su portavoz Iolanda Segura entiende que “haya familias que quieran preservar su salud” por el aumento de positivos, “tanto del alumnado como del profesorado”, y que “quieran pasar una Navidad en tranquilidad”.

Denuncia que ni el Departamento de Salud ni el de Educación estén tomando “las medidas necesarias”. “Es evidente que son insuficientes y hay que revisar los planes de actuación”. Aunque piensa que “la educación debe ser presencial”, también cree que desde la consejería se deberían tomar medidas más drásticas en algunos casos. Por ejemplo, propone cerrar antes del 22 de diciembre los centros con una incidencia más grave.

"No hay razón para no llevar a los niños al colegio"

Más tajante se ha mostrado la directora de las Asociaciones Federadas de Familias de Alumnos de Cataluña (Affac), quien asegura que “no hay razones para no llevar a los niños al colegio”. A pesar de que la sexta ola crece, considera que “con las medidas que hay actualmente y los protocolos que se siguen, las escuelas son seguras”. Tampoco piensa que se deba retrasar la vuelta al cole: “Los colegios tienen que abrir el día 10 de enero como estaba previsto porque los niños deben volver a la normalidad”.