La Urbana denuncia estar "bajo mínimos" ante el fin del toque de queda
CSIF "duda" que el Ayuntamiento de Barcelona pueda desplegar 1.000 agentes el fin de semana por "los recortes en seguridad"; UGT pide "prudencia" a la ciudadanía
19 agosto, 2021 14:19Los sindicatos de la Guardia Urbana de Barcelona alertan de que el fin de semana puede ser complicado por el fin del toque de queda a las 01:00 horas, pues el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) no ha validado la petición de prórroga del Govern a partir de este sábado, 21 de agosto.
En conversación con este medio, el portavoz de Administración Pública de CSIF, Eugenio Zambrano, ha avanzado de que "duda" de las cifras de refuerzo del operativo policial anunciadas hoy por el teniente de alcalde de Prevención y Seguridad, Albert Batlle, y que pasan por desplegar hasta 600 agentes las noches de lunes a jueves y 1.000 efectivos policiales los fines de semana. "No son realistas", ha advertido Zambrano.
"Vacaciones forzosas y sin horas"
El policía y activista ha argumentado su enmienda a Batlle. "El gobierno municipal y la Jefatura de la Guardia Urbana han reducido a la mínima expresión los servicios remunerados y se ha negado a la venta de vacaciones", ha recordado. Ello significa que hay un número de funcionarios de descanso, que algunas fuentes sitúan en el 40% del cuerpo, o que los que están operativos no pueden hacer horas extra porque se han reducido.
"En general, hay un recorte en seguridad por parte del Ejecutivo local y por parte del equipo del señor Pedro Velázquez. Lo venimos diciendo desde hace tiempo y ahora se plasmará con el fin del toque de queda en Barcelona", ha alertado la misma fuente.
UGT llama a la "prudencia" de la ciudadanía
Por su parte, desde UGT han recordado que la interlocutoria del TSJC "se tiene que cumplir" y que lo hará la Guardia Urbana "como siempre hace, con profesionalidad y sacando los servicios adelante". Un portavoz del sindicato ha llamado a "la responsabilidad" de la ciudadanía, pues "la pandemia no ha terminado".
El también efectivo policial ha subrayado que "aunque sean las Fiestas de Gracia, la normativa hay que seguirla igual". Por ello, se impone "cumplir con la distancia de seguridad y demás medidas", por cuanto "la gente joven también resulta afectada por la enfermedad, y algunos lo pasan muy mal". Urge, pues, ayudar a las unidades de la noche a hacer cumplir las restricciones que siguen vigentes.
"Descontrol" en las Fiestas de Gracia
Otro agente contactado por este medio ha recordado que la ciudad sufre mucha presión callejera en forma de, por ejemplo, bandas de carteristas o ladrones de relojes que vienen a Barcelona "a trabajar el verano". Ello es así porque "los detienen y entran y salen". Como muestra un botón, el pasado jueves fue un día negro en el robo de relojes en la Ciudad Condal, con varios avisos por emisora.
En el campo del incivismo, están las Fiestas de Gracia, que terminaron ayer en el desalojo de la menos 1.300 fiesteros por parte de la Unidad de Refuerzo a la Proximidad y Emergencias (URPE). "Son un descontrol, como cada año, y los compañeros no pueden entrar en una multitud a pedir que usen la mascarilla o mantengan la distancia. Se ríen de ti. Lo único que frenaba las fiestas sin fin era el toque de queda y, a partir del sábado, no regirá", ha apostillado la misma voz a modo de advertencia.