La retterofobia es la fobia a enviar sms con faltas ortográficas / FOTOMONTAJE DE CG

La retterofobia es la fobia a enviar sms con faltas ortográficas / FOTOMONTAJE DE CG

Vida

Retterofobia: el miedo a escribir mal un mensaje

Cometer alguna falta de ortografía al redactar es algo que produce ansiedad y malestar en ciertas personas

3 mayo, 2021 00:00

Redactar un correo electrónico, un mensaje de Whatsapp o el texto de una publicación en una red social puede convertirse en una auténtica tortura para las personas que padecen retterofobia. Temen cometer alguna falta de ortografía, por lo que sienten la necesidad de leer y revisar varias veces cualquier escrito antes de presionar el botón de enviar para asegurarse de que no hay ningún error.

Este es un miedo irracional e intenso que, como cualquier otra fobia, tiende a provocar ansiedad a todo aquel que la sufre. En esta ocasión, el temor acostumbra a estar ligado a la necesidad de perfección que sienten los retterofóbicos. Este es el caso de Luis Alcázar, un profesional del mundo audiovisual que padece esta curiosa fobia y que ha narrado su testimonio a Crónica Global.

Intolerancia a las faltas ortográficas

Luis ha presentado una conducta perfeccionista desde que era niño, aunque asegura que esta “ganó fuerza” cuando creció y se incorporaron a su vida las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Es consciente de que esta actitud se debe a otros comportamientos relacionados con su obsesión por la perfección. “Me frustra dejar algo a medias o mal hecho, como salir de casa sin haber ordenado el salón o dejar un plato de comida sin haber terminado la ración”, explica. De este modo, cometer un error ortográfico es algo que no concibe.

No obstante, esto no le pasa solamente con él mismo, sino que tampoco soporta que familiares o amigos cometan fallos al escribir. “Me disgustan las faltas ortográficas en general, pero me generan especial ansiedad las escritas por las personas que aprecio”, confiesa. Cuando alguien comete una, Luis empieza a sentir un malestar físico que cambia su ritmo respiratorio e incluso le agarrota los dedos de las manos.

Unas piezas para formar palabras / PEXELS

Unas piezas para formar palabras / PEXELS

Miedo a las consecuencias

Según ha detallado a este medio Ángel Rull, psicólogo experto en manejo emocional, lo que realmente temen los que padecen esta fobia no es el hecho de escribir mal, sino las consecuencias de hacerlo. “La gente retterofóbica necesita que los demás tengan una buena imagen sobre ellos, les valoren o admiren. Por eso, temen que al cometer un error de ortografía se dañe la imagen que los demás tienen de ellos y, en consecuencia, baje su propia autoestima”, apunta. 

Escribir perfectamente es prácticamente imposible. Todo el mundo puede cometer alguna falta de vez en cuando, por lo que difícilmente eso haría cambiar la percepción que tienen los demás sobre nosotros. No obstante, “cualquier persona que tiene una fobia hace que esta se active con el mero hecho de imaginar aquello que causa ese miedo”, explica Rull. Esto se debe a que “lo que nuestro cerebro vive, revive o imagina a nivel físico y emocional, es como si estuviera sucediendo en ese mismo momento”.

Una persona apunto de enviar un SMS / PEXELS

Una persona apunto de enviar un SMS / PEXELS

Pequeños avances

Tratar los procesos ansiosos es complicado, pero el psicólogo Ángel Rull asegura que “lo más importante es que quien los sufre sea consciente de los motivos por los que eso le ocurre, pero nunca tratarlo desde el detalle”. Al ser personas que suelen tener una baja autoestima, es importante que entiendan que no necesitan la aprobación de nadie. “Si eso no sucede, la fobia siempre crecerá porque conforme se van cometiendo fallos, el temor a cometerlos aumenta. Eso incrementa los nervios y estos provocan que se vuelvan a cometer esos fallos, creando un círculo vicioso que no cesa”, añade.

Luis Alcázar lleva tiempo intentando mejorar sus comportamientos perfeccionistas, diferenciando las tareas que son realmente importantes y las que no. En lo que respecta a su retterofobia, confiesa que Twitter le ha ayudado a “relativizar las faltas en mensajes que no se pueden corregir” y recientemente ha incorporado el estilo coloquial en conversaciones de Whatsapp. “Un gran logro ha sido escribir una frase exclamativa con un único signo de exclamación al final, aunque solo de vez en cuando”, reflexiona.