Varios indigentes en el parque de las Tres Xemeneies / @labcninvisible

Varios indigentes en el parque de las Tres Xemeneies / @labcninvisible

Vida

Asentamiento de indigentes y menores tutelados en el parque de las Tres Xemeneies

Vecinos denuncian robos, amenazas e inseguridad y reclaman un refuerzo de la actuación policial en la zona

23 mayo, 2020 00:00

Fue el pasado jueves, 14 de mayo cuando X.G., que vive justo delante de las Tres Xemeneies, alertó a la Guardia Urbana tras ver unas llamaradas en el parque. Habían encendido una hoguera en el asentamiento donde malviven algunos indigentes y jóvenes tutelados por la administración. Según denuncia este vecino, la presencia policial brilló por su ausencia.

Desde el consistorio de Barcelona detallan, a instancias de este medio, que la Urbana tiene “presencia constante” en la zona. Por su parte, fuentes de los Mossos d’Esquadra admiten que se trata de un emplazamiento “problemático” mucho antes de que se decretase el estado de alarma, donde se han registrado varios robos, y señalan que, en coordinación con la policía local, trabajan para paliar esta situación.

Confinarse en la calle

En el parque malviven personas sin hogar, que durante la pandemia también han permanecido en la calle. A pesar de las plazas de emergencia que ha habilitado el Ayuntamiento, la Fundació Arrels ha detectado a más de 1.200 sintecho en toda la ciudad. Y es que la adaptación a las normas que exigen estos alojamientos no son sencillas cuando uno se acostumbra a vivir en la calle.

Un colchón y una manta en el parque de las Tres Xemeneis / @labcninvisible

Un colchón y una manta en el parque de las Tres Xemeneis / @labcninvisible

Este residente en la zona también ha sido testigo de cómo trabajadores de Servicios Sociales proveen de comida a los indigentes que se han instalado en este parque. También los Mossos están en contacto con la red vecinal, señalan y, a nivel de seguridad ciudadana, trabajan para reducir la delincuencia en los alrededores de este parque de Poble Sec. Pero los vecinos están cansados de robos y amenazas.

Robos

“Después de avisar del incendio vi como dos jóvenes subían y bajaban la calle hasta que intentaron robar a otra chica, pero no fue algo puntual; sucede cada día”, denuncia X.G. “Peleas a las tantas de la madrugada y cuando salgo por la mañana me encuentro jeringuillas en el suelo, todo lleno de basura, es un desastre”, relata el vecino.

También se queja de los olores que desprende el asentamiento. “Es repugnante. Tengo que cruzar el parque para ir al supermercado y hay basura por todas partes: restos de comida, latas, de todo”, lamenta. “La última vez que llamé a la policía me dijeron que pasarían, pero no sé si se referían a que pasarían de todo”, ironiza.

Amenazas a vecinos

G. subraya que desde el inicio del confinamiento la situación ha empeorado. “Los vecinos hemos decidido cerrar el portal con doble vuelta de llave porque no es la primera vez que nos encontramos a alguien durmiendo en las escaleras”, detalla. Sí ha sido testigo de intervenciones policiales que han desalojado el parque. “Pero a las pocas horas vuelven a montar todo y allí están otra vez”, relata.

Una persona duerme en el parque de las Tres Xemeneies / @labcninvisible

Una persona duerme en el parque de las Tres Xemeneies / @labcninvisible

Este residente en el número 45 señala que, más de alguna vez, varios jóvenes han llegado a amenazarle. “Si te niegas a darles dinero, se encaran. ‘Es que tú eres un cabrón, sé dónde vives; y voy a ir a buscarte’, y se quedan tan anchos. ¿Qué tengo que hacer, pelearme?”, advierte. X.G, quien está harto de la inseguridad y el miedo, pero sobre todo, subraya, de la inacción del Ayuntamiento. “Se pasan la pelota unos a otros, pero nadie hace nada”, sentencia.

Peleas, gritos y suciedad

“Vivo delante y lo veo cada día. Motos tiradas, basura por todas partes. Ir desde casa a la panadería y cruzarte con este panorama es un suplicio”, explica. También los robos de menores a los vecinos. “Cuando llega la noche es aún peor, no dejan de oírse gritos; peleas”.

La desesperación le lleva a plantear: “¿Cuándo me asaltan, debo tomarme la justicia por mi mano?". Durante las últimas semanas se han sucedido intervenciones policiales que han desalojado el asentamiento, pero, con el paso de las horas, cuentan los vecinos, “no ha servido de nada porque han vuelto al mismo lugar”.