El hombre, explotado como mendigo, en las calles de Barcelona / MOSSOS D'ESQUADRA

El hombre, explotado como mendigo, en las calles de Barcelona / MOSSOS D'ESQUADRA

Vida

Cárcel para un clan por explotar a un hombre como mendigo

Tres personas obligaban a la víctima a pedir limosna en la calle durante 18 horas al día sin comer ni beber

12 febrero, 2020 11:37

Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana han detenido a dos hombres y una mujer, de nacionalidad rumana, como presuntos autores de un delito de tráfico de seres humanos con la finalidad de mendicidad. Los arrestados obligaban a la víctima a pedir limosna durante 18 horas al día en las calles de Barcelona sin comer ni beber. 

El clan controlaba en todo momento a la víctima, que se encontraba en situación de penosidad. De hecho, debido a su estado, ha sufrido la amputación de una pierna. Lo que recaudaba el hombre, entre 300 y 500 euros al mes, sus explotadores se lo gastaban en un juego de azar popular en Rumanía, conocido como "barbudo", y para adquirir propiedades allí. 

Servicios sociales

La investigación comenzó en agosto de 2018, después de que los servicios sociales del Ayuntamiento de Barcelona detectasen un posible caso de explotación por mendicidad de un hombre que pedía limosna en el barrio de Gràcia

La vítima es un hombre de edad avanzada, que no tenía recursos ni trabajo en su país de origen. Vivía en una casa en mal estado, y no tenía formación profesional ni estudios. Tampoco tenía ningún familiar. Así, los tres arrestados lo detuvieron para venir a la capital catalana bajo la falsa promesa de mejorar su situación precaria, acceder a un empleo y obtener ingresos. Una vez en Cataluña, quienes lo captaron le retiraron la documentación y le obligaron a dormir en la calle, donde en ocasiones pasaban hasta 18 horas al día. 

Investigación

Agentes de la División de Investigación Criminal (DIC) de la policía autonómica, en coordinación con la Urbana, identificaron a los responsables de la captación, el traslado y explotación del hombre. Tres individuos de nacionalidad rumana, que formaban parte de un clan familiar. 

El juzgado de instrucción 5 de Barcelona emitió dos órdenes europeas de detención, ya que dos de los sospechosos habían huido del país. Meses más tarde, con la colaboración de las autoridades de Rumanía, fueron extraditados a España, donde la magistrado decretó su ingreso en prisión, junto a la tercera sospechosa, que fue arrestada el pasado 19 de enero en la capital catalana.