"Insuficiente". Este es el consenso de los sindicatos de sanitarios respecto al plan de invierno del Departamento catalán de Salud para la sanidad pública, que ha conseguido solo un 5% más de recursos (21,4 millones en total) pese a las imágenes de colapso de las urgencias que viven los hospitales catalanes cada campaña de la gripe.
La parte social alerta de que el dinero y los medios destinados a todo el plan de prevención, incluidos los 4,4 millones para la vacunación contra la gripe, se quedan cortos. Así lo ve CCOO, que espera que "se agreguen más profesionales o se destine dinero" a las medidas de invierno. Precisamente, este sindicato alertó la pasada campaña del "colapso crónico" del servicio de urgencias hospitalarias. En enero de 2019, Comisiones advirtió de "aglomeración de pacientes en los pasillos, boxes de observación doblados, peticiones de refuerzos de los profesionales, poco espacio para trabajar y poca seguridad". Pese a ello, el Govern apenas ha encontrado dinero extra para prevenir estos problemas.
UGT: "Estamos en mínimos en contratación"
UGT suscribe esta versión y recuerda que el Plan Integral de Urgencias de Cataluña (Piuc) "lleva años en contratación de mínimos". Ello quiere decir que el Departamento apenas contrata personal médico para los centros hospitalarios. "La prevalencia de la gripe en el invierno 2019/2010 se prevé similar a la del año anterior. También en breve se activará el plan contra el Virus Respiratorio Sincitial (VRS), que discurre paralelo al Piuc. Pero entre ambos, la contratación de sanitarios en Cataluña en invierno lleva años anclada en el mínimo histórico", subrayan.
¿Qué pasará en atención primaria? La puerta de entrada al sistema sanitario público catalán llegará también renqueante a las fases más virulentas de la epidemia. Fuentes sindicales han indicado que, como vienen denunciando hace años, el plan de invierno de Salud "vuelve a ser hospitalocéntrico". Significa ello que los ambulatorios catalanes quedan en un segundo plano. "Habría que cambiar el modelo hospitalcentrista por uno más primarista con inversión suficiente. Mientras el modelo sea éste, las urgencias se colapsarán en invierno", manifiestan las fuentes consultadas. "Por ahora están solo los Centros de Urgencias de Atención Primaria (CUAP) que, en algunos casos, son más resolutivos que las urgencias de un hospital", recuerdan.
Bellvitge 'da turno' para una camilla
Estas son las armas de las que dispone la Sanidad pública catalana para lidiar con las dolencias típicas de esta época del año y la gripe, que llegará a su nivel más virulento entre las semanas dos y ocho del año 2020. A casi tres meses de que ello ocurra, los hospitales catalanes operan al límite. Es el caso de, por ejemplo, el Hospital de Sant Pau i la Santa Creu. El centro sanitario que ha copado los titulares por tratar a heridos de los disturbios independentistas sufre en silencio otro problema menos conocido: está saturado. A principios del puente de Todos los Santos las esperas para el médico tras pasar por el triage de urgencias alcanzaban las siete horas.
En el Hospital Universitari de Bellvitge (HUB), referencia para más de un millón de catalanes de la zona del Baix Llobregat, CGT ha denunciado que la inauguración de los nuevos quirófanos ha provocado el colapso en admisión. "Inauguraron el bloque quirúrgico, pero nadie pensó en poner más camas", lamentan en conversación con este medio. Señalan que urgencias está tan saturada que la gerencia da turno para una camilla en el pasillo mientras se aguarda a una cama de hospitalización. La dirección lo niega y recuerda que "solo se han sustituido los viejos quirófanos por los nuevos". Respecto al invierno, el hospital se remite a los refuerzos del Piuc. Los sindicatos matizan que el plan no prevé contratar a más médicos, sino solo a enfermeros, lo que no ayuda a facilitar el drenaje de las urgencias.