El jerez, un vino único en el mundo
La identidad de estos vinos descansa en varios factores: un clima privilegiado, suelos albarizos y un sistema exclusivo de crianza y envejecimiento mediante criaderas y soleras
29 septiembre, 2019 00:00El enoturismo se ha convertido en los últimos años en una de las experiencias más atractivas y demandadas por el gran público. Esta práctica turística pone en valor una actividad que está íntimamente ligada al paisaje, la cultura y la economía de un territorio. Al noroeste de la provincia de Cádiz, agrupados en el conocido como Marco de Jerez, nacen unos vinos únicos en el mundo, herederos de una actividad vitivinícola con más de 3.000 años de historia, son los vinos de Jerez.
Motor económico de la región, las 71 bodegas de crianza amparadas en la D.O. (la más antigua de España) elaboraron la pasada campaña, 2018-2019, 145,8 millones de litros. Su principal mercado es el nacional con un volumen de negocio del 38% seguido del Reino Unido, Holanda y Alemania y como vino viajero, que ha sido siempre, tiene una fuerte presencia en Estados Unidos, Canadá o Japón. Veamos qué hace a estos vinos tan especiales.
Zonas de produccion y de crianza
Un total de nueve municipios --Jerez de la Frontera, Sanlúcar de Barrameda, Chipiona, El Puerto de Santa María, Chiclana de la Frontera, Rota, Puerto Real, Trebujena y Lebrija (este último, en la provincia de Sevilla)--, unas 10.000 hectáreas de superficie, acogen los viñedos con los que se elaboran los distintos tipos de jerez. Es la zona de producción del Marco de Jerez. Las bodegas de crianza, donde envejecen los vinos, se establecen en el llamado Triángulo de Jerez: Sanlúcar de Barrameda, El Puerto de Santa María y Jerez de la Frontera.
Esta región del sur peninsular goza de un favorable clima de suaves temperaturas. La cercanía del Atlántico, los vientos de levante y de poniente y una pluviosidad alta (620 litros/m2 al año) generan la atmósfera y las condiciones ideales para el desarrollo de las cepas. La peculiaridad también se encuentra en los suelos albarizos. Sus tierras son ricas en carbonato cálcico, elementos silíceos y arcillas que absorben la humedad y la almacenan garantizando así los nutrientes a las vides durante los meses más secos. Fruto de todos estos factores nacen las tres variedades de uva blanca que dictamina el Consejo Regulador como aptas para la producción: palomino, pedro ximénez y moscatel. Un abanico de colores y de sabores presentes en sus excelentes vinos reconocidos y conocidos en todo el mundo.
Criaderas, soleras y tipos de Jerez
Sin embargo, su personalidad se debe al proceso de crianza biológica y envejecimiento durante años, mínimo tres años aunque suelen ser bastantes más, en las botas (barricas) de roble americano mediante un sistema tradicional de criaderas y soleras. Este método consiste en mezclar, de forma controlada, vinos de sucesivas cosechas y por tanto con distinto nivel de envejecimiento. En la parte inferior, tocando el suelo, se encuentran las que contienen los más antiguos, las soleras, y en los niveles superiores las criaderas ordenadas según su antigüedad. De esta manera todos los vinos mantienen su homogeneidad independientemente de las oscilaciones de cada cosecha.
Los años de envejecimiento en bodega dan lugar a los distintos tipos de jerez, más de diez. Desde los más claros y secos hasta los más oscuros y dulces: manzanilla, fino, amontillado, oloroso, palo cortado, pale cream, médium, cream, moscatel, pedro ximénez, y las categorías especiales entre los que se encuentran los VOS con más de 20 años de crianza y los VORS con más de 30.
Enoturismo y algunas curiosidades
La Ruta del Vino del Marco de Jerez es una de las más populares en nuestro país y la más visitada de Europa con un promedio de medio millón de turistas al año. Numerosas bodegas ejercen de cicerones difundiendo este rico patrimonio histórico y cultural que goza de gran prestigio internacional. Tanto es así que uno de los vinos preferidos de la reina Isabel II de Inglaterra nace en una de ellas. Bodegas Fundador, cuyo origen se remonta a 1730, elabora el Harveys Bristol Cream, el único producto español que presume de poseer el prestigioso Royal Warrant, un sello distintivo que se otorga a los proveedores del palacio de Buckingham.
Pero su reputación le viene de lejos, casi desde sus orígenes. Por estos muros centenarios han pasado reyes: Alfonso XIII o Fernando VII y también ilustres y folclóricos personajes: Gregorio Marañón, Alexander Fleming, Jacinto Benavente, Charlton Heston, Lola Flores, Cantinflas o Rocío Jurado.
Maridaje de vino y arte
Y no hay mejor plan que admirar, copa en mano, obras de Goya, Zurbarán, Luca Giordano, Velázquez o el Greco, todas ellas pertenecientes a una de las mejores colecciones privadas de pintura española de toda Andalucía. Arte en estado puro en Bodegas Tradición, la única que elabora exclusivamente vinos muy viejos los VOS y VORS.
Fundadas por Thomas Osborne en 1772 en El Puerto de Santa María, y siempre en manos de la familia, Bodegas Osborne mantienen vivo un rico legado y son conocidas tanto por sus vinos y brandis como por su icónico toro. Su oferta enoturística permite al visitante, entre otras actividades, conocer la colección de vinos más antiguos de Jerez o adentrarse en la historia del astado más famoso de nuestras carreteras en la Toro Gallery. La experiencia se completa en el Toro Tapas, la apuesta gastronómica de la saga dónde disfrutar de la rica tradición culinaria gaditana maridada con sus vinos.