Tres platos típicos de la provincia de Girona
Un breve repaso a la gastronomía de la región gerundense
18 septiembre, 2019 20:12Pese a que Girona es conocida, entre otras cosas, por sus incuestionables atractivos naturales, la realidad es que la región catalana acoge una gran cantidad de secretos en su interior con los que hacer disfrutar a todos sus visitantes.
Uno de ellos es su gastronomía, posicionada como una de las señas de identidad de la zona. La proximidad de la provincia tanto con la montaña como con el mar hace que sea posible degustar en su interior multitud de platos dispuestos a conquistar todo tipo de paladares. A continuación, algunos de los más míticos.
Mar y montaña
Mar y montaña es el plato con el que se conoce la propuesta que une productos tan dispares, a priori, como el pollo y la langosta. Sin embargo, y pese a que en un primer momento puede llamar la atención por su propia naturaleza, la realidad es que el sabor de la fusión de ambos productos hace que sea uno de los más populares de la zona.
Su calidad es tal que algunos de los cocineros más conocidos del mundo, como el prestigioso Ferran Adrià, suelen utilizarlos de manera habitual en sus creaciones.
Butifarra dulce con manzana
La butifarra es uno de los productos tradicionales más conocidos de Cataluña. Se puede consumir de multitud de formas y en una gran variedad de platos: al horno, a la brasa, frita o confitada, entre muchos otros. En la mayoría de los casos, es el pan el que actúa como ingrediente principal.
Sin embargo, con manzana es una de las combinaciones que suelen ofrecer los restaurantes de la zona de Girona. La combinación de sabores hace que nos encontremos ante una de las propuestas más reconocidas de la región.
Suquet de rape y gamba roja
De origen marinero, el suquet es uno de los platos más característicos de la Costa Brava. Su cocción se realiza en olla, y es uno de los guisos más típicos que nos podemos encontrar en esta zona de la región catalana.
Su origen se debe a consecuencia de la tradición pesquera de la zona. Los pescadores utilizaban los pescados que no estaban aptos para su venta para ellos mismos y para su tripulación. Además, el rape y la gamba roja son dos de los productos más típicos de la cocina de la Costa Brava.