Cuatro platos sencillos para iniciarse en las dietas 'veggie'

Las dietas vegetarianas y veganas cada vez son más comunes, ya sea por cuestiones medioambientales, de ética, de salud o de gusto. Este tipo de alimentaciones puede ser perfectamente saludable como establece la Academia Americana de Nutrición y Dietética.

Para disminuir el consumo de productos de origen animal, hay recetas sencillas que son ideales para el día a día, las ocasiones especiales y hasta para iniciarse. Elaboraciones de fácil realización que pueden introducirse de manera ocasional en la alimentación. Recopilamos varias:

Hummus

Este paté de garbanzos se utiliza como snack o como untable y es una alternativa vegetal y llena de proteínas, fibra y sobretodo sabor.

Se vende prácticamente en todos los supermercados y también es de fácil preparación en el hogar pues solo hay que batir garbanzos, tahini, ajo, aceite de oliva y limón. Hay quien espolvorea un poco de pimentón como broche final.

Boloñesas de soja texturizadas

La soja texturizada es la sustituta perfecta a la carne picada. Este tipo de soja solo tiene que hidratarse durante un par de minutos en agua caliente y después ya se puede cocinar como si fuera carne cruda para añadirla en cualquier sofrito.

También resulta muy recurrente para recetas de pasta, canelones, lasaña, berenjenas rellenas y todas las recetas a las que la imaginación nos lleve.

Guisos de legumbres de toda la vida

Los platos de legumbres de siempre como los hechos con lentejas o las alubias son grandes fuentes de proteínas, hidratos y micronutrientes necesarios como hierro.

Dado que la base son legumbres, verduras y hortalizas, basta con no usar los alimentos de origen animal para tener un plato veggie con fundamento y muy nutritivo. Las especias como el pimentón ayudan a dar sabores similares a los de carnes como el chorizo.

Platos con tofu

En los últimos años ha quedado claro que el tofu es uno de los grandes aliados de las dietas vegetarianas y veganas. Este derivado de la soja es muy polivalente ya que no tiene sabor y está disponible en diversas texturas y firmezas. Así, admite todo tipo de marinados o salsas para que se pueda emplear en múltiples recetas.

Este alimento se puede preparar a la plancha o se puede rebozar y freír. También admite ser empleado en rellenos e incluso como base de algunos postres como la mousse vegana de chocolate.