Una agente detiene a una de las integrantes de la banda del rólex en el Aeropuerto del Prat / POLICÍA NACIONAL

Una agente detiene a una de las integrantes de la "banda del rólex" en el Aeropuerto del Prat / POLICÍA NACIONAL

Vida

Cazan a integrantes de la 'banda del Rolex' en el aeropuerto de Barcelona

La Policía Nacional detiene a seis individuos, de nacionalidad napolitana, por robar relojes de alta gama

3 junio, 2019 13:55

La Policía Nacional ha detenido a seis individuos de nacionalidad napolitana que integraban la "banda del Rolex", por robar relojes de alta gama. Los agentes localizaron a dos de ellos en el domicilio de Playa d'en Bossa (Ibiza) en el que se hospedaban, mientras que arrestaron a otros cuatro en el aeropuerto del Prat de Barcelona

Placas de matrículas, cascos de moto y documentos falsos / POLICÍA NACIONAL

Placas de matrículas, cascos de moto y documentos falsos / POLICÍA NACIONAL

Placas de matrículas, cascos de moto y documentos falsos / POLICÍA NACIONAL

Los sospechosos, cuatro varones de entre 42 y 23 años, y dos mujeres, de 18 y 23, están acusados de sustraer dos relojes con un valor de 60.000 euros, en la denominada milla de oro de la isla balear. 

Registro

La policía localizó el escondite de los delincuentes y, tras efectuar el registro, localizaron documentación falsa, así como matrículas fraudulentas y dos motos que usaban para cometer los robos. Fue en ese lugar donde detuvieron a dos sospechosos.

El resto consiguió huir de Ibiza, y fueron arrestados en Barcelona, cuando esperaban para coger el vuelo a Nápoles. Están acusados de robo con violencia, falsedad documental y asociación ilícita.

Camorra

Estos grupos criminales que roban relojes de alta gama operan en Ibiza y en otros puntos de la costa española desde hace numerosos años, según ha explicado la policía. Se trata de auténticas bandas organizadas que están vinculadas con los estratos "más bajos de la Camorra napolitana", por lo que cumplen con un el reparto de tareas que marca la jerarquía establecida en el clan. 

Los delincuentes tienen una gran capacidad de adaptación y permanecen poco tiempo en la zona en la que actúan, generalmente una semana, hasta que otros toman el relevo. Lo habitual es que regresen a Italia, aunque a veces se desplazan a delinquir a otra zona de España. Los relojes sustraídos se venden en el mercado negro internacional.