Una prostituta ha muerto en las últimas horas mientras se recuperaba de una paliza recibida en el barrio del Raval, donde ofrecía servicios sexuales. Lily, cuyo nombre real se desconoce, ha perdido la vida en el Parc de Salut Mar de Barcelona (PSMAR), donde estaba ingresada desde hacía días.
Según han informado fuentes vecinales, la trabajadora del sexo ha muerto por circunstancias que se desconocen. Lo acreditado es que la ciudadana, originaria de Europa del Este, sufría de leucemia, lo que habría podido ser la causa de la muerte, según indican las voces consultadas. Se conoce también que Lily había sido agredida en repetidas ocasiones por su chulo, un ciudadano de origen rumano. No se conoce si esta última lluvia de golpes, que ha acabado en trágico desenlace, se puede atribuir al mismo autor material.
Palizas de su 'chulo'
Preguntado por la cuestión, un portavoz de los Mossos d'Esquadra ha indicado a este medio que no constaba un homicidio de estas características en la base de datos de la policía autonómica. Sí han aportado más información sobre el suceso plataformas vecinales y activistas proabolición. Núria González, candidata del partido no nacionalista Actúa y activista abolicionista, ha informado de que "anoche, una chica prostituida víctima de trata y cuya situación fue puesta en conocimiento por los vecinos de Illa RPR --una asociación vecinal-- murió tras ser ingresada en el hospital por una paliza".
Calle d'en Robador, donde Lily ofrecía servicios sexuales / Google Maps
La misma fuente ha atribuido la autoría del trágico suceso a un cliente, aunque fuentes vecinales matizan que, aunque se desconoce la autoría de esta última agresión, en anteriores ocasiones Lily había sido golpeado por su chulo. "Mantenía una relación muy tensa con el hombre, pues éste ejercía control sobre ella mediante vínculos familiares. Pero le pegaba tanto que la vecina había estado ingresada en el hospital en varias ocasiones en los últimos meses", han aclarado las voces consultadas.
La concejal Gala Pin, interpelada
A la espera de que se esclarezcan las causas de la muerte de la chica, vecinos y activistas proabolición de la prostitución han extendido su dedo acusador hacia la concejal del distrito de Ciutat Vella, Gala Pin, a quien acusan de "conocer la situación de vulnerabilidad de la mujer y no actuar". Lo han verbalizado la plataforma Catalunya Abolicionista y la propia asociación Illa RPR. Fuentes vecinales han confirmado que el Ayuntamiento conocía la situación de la joven, cuya edad rondaba los 30 años.
Por contra, otra de las plataformas que quieren poner voz al sector, Putas Libertarias del Raval, ha tildado de "incorrecta" la información de que la agresión fue propinada por un cliente y ha conminado a "respetar la intimidad" de la vecina. También ha enfatizado esta asociación que el caso está en fase judicial y que tomará medidas judiciales contra las personas físicas, instituciones o medios de comunicación que divulguen la noticia.