Con la llegada del mes de diciembre, el espíritu navideño invade las ciudades de todos los puntos del país y anima a la gente a salir a la calle para disfrutar en familia de unas fechas tan señaladas. Si hay algo que representa de una forma especial estos días es, por supuesto, la presencia de dulces como turrones, mazapanes o chocolates. En esta época consiguen su pico más alto en cuanto a ventas y tienen un lugar destacado en todo tipo de cestas, bandejas y mesas durante Navidad.
El turrón es uno de los más solicitados en sus diferentes versiones y sabores. Este producto está elaborado con una masa dulce obtenida a partir de la cocción de miel a la que se pueden incorporar otros ingredientes. Uno de los más comunes es la almendra, aunque también hay otros que incorporan otros frutos secos, arroz e incluso galleta.
El origen del turrón español
En España, la producción de turrón se extiende por diferentes puntos del país, aunque destaca el dulce de la localidad de Jijona, en Valencia. A este municipio se le atribuye el origen de este postre navideño en su versión de turrón blando (por ello también se le conoce como turrón de Jijona". Su característica más destacada es la apariencia pastosa y la gran cantidad de almendras molidas en su interior.
La ciudad de Barcelona dispone en estas fechas de multitud de establecimientos en los que se fabrica este producto de forma artesanal con el objetivo de deleitar los sentidos de todo aquel que lo prueba. Estas son algunas de las mejores tiendas de la capital catalana para comprar estos dulces:
Torrons Vicens
Torrons Vicens es una empresa familiar con una larga tradición turronera que fue fundada en la localidad de Agramunt (Lleida) en 1775. No obstante, antes de abrir la tienda la familia Vicens ya era fiel a la elaboración de este producto al menos 30 años antes, puesto que existe documentación datada en 1741 que ya habla de ello.
A día de hoy, los turrones de esta casa son reconocidos por su sabor y por su carácter artesanal. La familia Vicens cuenta con un museo muy especial en el propio Agramunt: el Museo del Turrón y el Chocolate. En cuanto a tiendas, la actividad de Vicens se distribuye por toda Cataluña --especialmente en Barcelona-- y en otros puntos del país como Madrid.
Casa Colomina
Casa Colomina es una de las empresas de dulces más reputadas en la elaboración de turrón. Este otro negocio familiar fue creado en el año 1908 por una familia de larga tradición en la creación de turrones y actualmente cuenta con diversos establecimientos repartidos por la ciudad de Barcelona.
A pesar de ubicarse en Cataluña, la generación a cargo del negocio se encuentra continuamente viajando a Jijona, donde cuentan con su propia producción. En Casa Colomina, además de turrones de variedades duras y blandas, también disponen de otros dulces como mazapanes, polvorones, garrapiñadas, etc.
Pastelería Natcha
La Pastelería Natcha es una empresa con una amplia tradición turronera que se fundó en el barrio de Les Corts de Barcelona en el año 1958. Sus impulsores fueron Isidre y Rosa, ambos con el oficio de pastelero (en el caso de Isidre, de forma profesional y acreditada).
El objetivo de Natcha es ofrecer al cliente productos de alta calidad siguiendo la tradición artesana de la pastelería y reforzando la confianza y cercanía con el cliente final. En lo que se refiere a los turrones, la pastelería dispone de un catálogo compuesto por más de 30 variedades distintas, entre las que destacan algunas como los turrones de chocolate con avellanas, almendras y trufado de whisky, entre otros.
La Campana de Princesa
La Campana de Princesa es una empresa familiar fundada en el año 1890 por Francisco Mira Miralles, un conocido turronero nacido en Jijona que ha sabido mantenerse en primera línea gracias a su respeto por las elaboraciones tradicionales y a su utilización de materias primas de máxima calidad.
Después de cuatro generaciones de tradición turronera, este dulce es, sin duda, su producto estrella y cuenta en su oferta algunas variedades de sabor exquisito. Por ejemplo, el turrón de yema quemada, el de coco, el de nata y nueces o el de mazapán con y sin frutas.