Tres pasajeros han resultado heridos en el Metro de Barcelona la madrugada del domingo tras un ataque masivo de grafiteros. Una mujer embarazada es una de las lesionadas por el ataque de 34 vándalos, que han arremetido contra el convoy del suburbano en la estación de Maragall de la Línea 4 poco antes de las cuatro de la madrugada.
Según ha informado Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), la agresión se ha producido a las 3:48 horas de la madrugada, cuando los grafiteros han accionado el freno de emergencia del vagón. En aquel momento, han comenzado a estampar sus pintadas en el vehículo. Parte de los pasajeros les han recriminado su actitud, momento en el que los vándalos han cargado contra ellos. La mujer embarazada ha sido rociada con espray en la cara, mientras que otros dos pasajeros han sido insultados y golpeados. Ninguno de ellos, ha precisado TMB, ha sufrido heridas de consideración.
Grabaron su acción
Tanto la gestora del transporte metropolitano como los viajeros han anunciado que presentarán denuncia por los hechos. Esta queja formal para identificar y castigar a los atacantes será más fácil gracias a la acción de los vigilantes de seguridad, que han logrado cazar a uno de los grafiteros. Lo han retenido hasta la llegada de los Mossos d'Esquadra, que se han desplazado hasta el lugar de los hechos. Los agentes se han incautado de material para vandalizar el tren y una cámara tipo GoPro para grabar toda la acción.
Grafiteros atacando el Metro de Barcelona en una acción vandálica anterior / CG
Por su parte, el resto de la turba ha huido a toda velocidad tras acabar su obra de arte. Se han dispersado, ha agregado TMB, por los vestíbulos de las líneas 4 y 5 de la Estación de Maragall del Metro de Barcelona. El suburbano ha tenido que parar la circulación de convoyes durante unos minutos en este punto, ya que el tren ha quedado cubierto de pintura en ambos lados. Tras ello, los empleados de la infraestructura se han visto retirados a retirar el vehículo de la circulación.
Quejas de los sindicatos
Cabe recordar que el problema de la proliferación de ataques de grafiteros en el Metro de Barcelona no es nuevo. El pasado 28 de junio, los empleados del suburbano se concentraron ante el Ayuntamiento de Barcelona para denunciar "agresiones, amenazas y un aumento de la violencia" por parte de los vándalos. En paralelo, sus compañeros realizaron dos paros en el servicio, uno por la mañana y otro por la tarde. La teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, y el consejero delegado de TMB, Enric Cañas, recibieron entonces a los empleados públicos, convocados por CCOO, UGT y CGT, pero el problema continúa repitiéndose.
Grafiteros como los que han agredido a la mujer embarazada en el Metro de Barcelona / TMB
Tras el nuevo ataque de hoy, la empresa de movilidad que preside Mercedes Vidal ha informado de que "el fenómeno es está acentuando, con frecuencia, en el número de personas participantes y sobre todo en agresividad y violencia". TMB ha añadido que los grafiteros no solo atacan el material rodante, sino que también arremeten contra los "viajeros, empleados o vigilantes de seguridad". Ante ello, la empresa ha asegurado que "está realizando acciones propias", pero que también ha realizado "gestiones" con los cuerpos y fuerzas de seguridad y la Judicatura para pedir su "implicación". Cree TMB necesaria la "coordinación" de "todos los actores" para zanjar este fenómeno.