En España, las mujeres tienen que trabajar 52 días más al año para cobrar lo mismo que los hombres, según el informe Voces contra la precariedad: mujeres y pobreza laboral en Europa que publica Oxfam Intermón.
Aun así, la brecha salarial española --14,24%-- es ligeramente inferior a la europea: como media, las mujeres ganan un 16% menos que los hombres en los países del continente.
El 14% de la diferencia salarial, por el género
La brecha salarial puede explicarse por factores como la edad de la trabajadora, su experiencia y el tamaño de la empresa, aunque un 14% de la diferencia de salario en España "sólo puede atribuirse a la discriminación directa o indirecta por razón de género".
Las mujeres constituyen mayoría entre la población con salarios más bajos, tanto en Europa como en España. En 2014, el 20% de las mujeres experimentó baja remuneración, en comparación con el 10% de los hombres. Respecto a las remuneraciones más elevadas, las mujeres representaron solo el 20% de entre el 10% de población trabajadora con mayores ingresos. De 609 consejeros delegados existentes en Europa dentro de las grandes empresas, solo 36 –el 5%-- son mujeres.
Datos ocultos
Oxfam Intermón advierte en su informe que la "pobreza laboral" de las mujeres "queda en parte invisibilizada" estadísticamente "porque los datos de pobreza laboral se calculan por hogares y no reflejan la discriminación de género dentro del hogar".
"Para explicar esta discriminación, solo hay que poner el foco en algunos sectores como la asistencia social, el cuidado infantil, la restauración, servicios de limpieza o la atención al cliente para ver que están mayoritariamente feminizados", explican desde Oxfam Intermón con datos: en España, el 55,8% del trabajo del hogar lo hacen mujeres, y el 87,9% de los cuidados.
Tiempo parcial
Las mujeres tienen también el doble de posibilidades que los hombres de tener un trabajo parcial no deseado: casi cuatro de cada cinco personas trabajadoras a tiempo parcial en la Unión Europea son mujeres, y en España, casi tres de cada cuatro.
"El perfil que se dibuja de estas mujeres precarizadas en Europa y en España está muy claro: mujeres migrantes, jóvenes y familias monomarentales son las que afrontan el riesgo más alto de precariedad y pobreza laboral", afirma el director de Oxfam Intermón, Chema Vera.
La pobreza laboral
El informe advierte que ser mujer migrante o familia monoparental incrementa el riesgo de pobreza laboral. En España, más de la mitad de las familias monoparentales están en riesgo de pobreza y exclusión social. El 83% de estas familias están encabezadas por mujeres.
El "trabajo invisible y no remunerado" de las mujeres dedicadas a los cuidados o a tareas domésticas, que según la organización son "el andamio sobre el que se construye el crecimiento en Europa", ya que supondría el 13% del PIB mundial, y el 27% de España. El trabajo domestico no remunerado tanto de hombres como de mujeres llegaría al 41% del PIB español. Las mujeres en Europa dedican una media de 22 horas a la semana al trabajo no remunerado, mientras que los hombres dedican menos de 10 horas.